Capítulo 42

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El festival de Avicena empezó el primer día de primavera, el escenario principal estaba en el club deportivo y varias atracciones se repartían por el enorme bosque artificial, los estand eran realmente gigantes y muy variados, había comida y juegos por todas partes, por lo que de verdad no sabía por dónde comenzar.

— Quiero una brocheta de albóndigas de cerdo —dijo Mike. Faltaban un par de horas para el mediodía y me encontraba acompañada por él y Sabrina, ella estuvo de acuerdo en tomar una brocheta mientras yo me negué.
—¿Él no se está sobrepasando, o si? —le pregunté en cuanto fue por la comida y  nos dejó solas.
—No, de verdad está siendo un buen amigo.
–Que alivio.

Ese día paseamos y exploramos el campus sin pensar en nada de importancia, Mike participó en algunas actividades y los tres decidimos ver una obra, probar la realidad virtual, ver una competencia de skate, y finalmente buscar un lugar en el café para almorzar.

Cuando tomamos una mesa oímos la puerta abrirse  y entonces hicieron su entrada los mellizos, Jenny y Adam, de inmediato se dirigieron a nosotros sin ser invitados y de algún modo acabé siendo parte de ese ruidoso y extraño grupo.

—¿Dónde está Aarón? —preguntó Eric.
—No tengo idea. —respondí con sinceridad. Desde lo ocurrido con Gastón no había regresado a los laboratorios, ni mencionó nada sobre el ensayo, el día anterior no nos vimos y aquel día tampoco hablamos, aún así tenía la sospecha de que se encontraba estudiando toda la información que recolectamos sobre Alessandro y los Archer para planear alguna estrategia. Esa era su mayor y única prioridad por el momento.
—Debes quererle mucho para estar con él cuando ni siquiera pasan tiempo juntos. —opinó Eric, que atraía a Jenny para abrazarla.
—Claro que pasamos tiempo juntos, solo tenemos vidas independientes... lo cual es muy sano.
—Eso esta  bien, dar espacio y tener confianza. Es exactamente lo que pienso sobre las relaciones. —comentó Julián, lanzando una mirada seductora a Sabrina quien hizo notar su nerviosismo, por su parte Mike miró a uno y a otro con cierto disgusto. Empezaba a pensar que allí comenzaba a gestarse una historia muy rara.
—¿Saben lo que pienso de las relaciones? Que es aburrido hablar de ellas. —aportó Adam.

Lo miré de soslayo, se veía cambiado, había cortado su cabello y también me pareció que perdió un poco de peso, la camisa Hawaiana que usaba dejaba ver su clavícula y parte de su tórax, llevaba algo de barba, pero existía algo más que un cambio físico, por alguna razón pensé que algo mucho más profundo ocurría en su interior.

Todos siguieron hablando y riendo, la mesa pronto estuvo llena de comida y bebidas y después de una hora o así, todos estaban ansiosos por volver al festival.

—¿Quieren ver la casa del terror? Dicen que es sangrienta.
—Yo prefiero el viaje en el tiempo. —opinó Julián.
—¿Qué es eso? —se interesó Sabrina. Julián se mostró satisfecho de llamar su atención.
—Se trata de un recinto con seis puertas, según donde entres te lleva a un lugar específico: al Renacimiento italiano, un combate de gladiadores en el Coliseo Romano, una disco de los 70 en Estados Unidos, a un campo de batalla de la segunda guerra mundial, al antiguo Egipto o a una ciudad futurista. 
—Suena interesante.

Así que no hubo mucho más por discutir, todos fuimos a hacer un viaje en el tiempo. Al llegar nos encontramos con seis puertas misteriosas, Eric y Jenny fueron los primeros en desaparecer por una de ellas... luego empezó la contienda entre Mike y Julián.

—¡Yo voy con Sabrina! —pidió este último.
—No, ella vino conmigo. —lo increpó Mike.
—Pero soy más divertido y genial.
—¿Según quien?
—¿La selección natural?

Adam y yo observamos en silencio como los chicos discutían y Sabrina trataba de mediar con ellos con voz tímida.

—Ella es popular.
—Lástima que lo dos son tarados.

Círculo Vicioso [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora