Por favor ámame... (2)

Capitulo 3

-¿Tu...? ¿Tu casa?- me atragante ligeramente sorprendida de su acotación, extraña e impactante acotación, cabe decir. Iba únicamente con un traje de baño negro por debajo y su torso al desnudo. Su pelo castaño claro estaba mojado y su mirada nuevamente casi hace que me atragante.

-Si. Bueno, no. De mi familia.

-¿De tu familia?-Pregunte nuevamente como estupida.

-¿Nunca dejas de preguntar?-me chasqueo los dedos al ver que estaba a punto de caerme.-Soy Seth Touse. Hermano de Shaira.

Tosí un poco de la impresión mientras el se apartaba de la puerta dándole la pasada a su enorme casa, casi mansión.

-No sabía que Shaira tenía un hermano.-dije con un hilo de voz mientras observaba como un gran salón de tonalidades café oscuras y rojas inundaban en cortinas, sofás y mesas. También había una chimenea y por el gran ventanal de podía ver una pileta.

-Shaira no presume al parecer.-Se bufó mientras me tomaba del hombro hacia el gran salón con techo altísimo.-Ven pasa. Shaira ya llegará.

-Wow ¿y esta es apenas su sala?-pregunté un poco boquiabierta. Era una casa hermosa, preciosa para decir la verdad.

-Sala, salón, lugar donde dormir, lugar donde emborracharse.-describió sonriente.-Un poco amontonado para mi gusto.

-Es hermoso.-respondí olvidando por un momento que le odiaba.-Es de tu familia... como habías dicho.

-La verdad mío. Pero Shaira se está quedando aquí, por lo grande. No me es molestia recibir a mi hermana.-respondió luego de que me indicó asiento en uno de los sofás.-Shaira y yo estamos juntos desde los 5. La adoptaron y resulta que es una gran mujer.
»¿Quieres?

Me ofreció un vaso de Bourbon anaranjado, el cual lo niego pero el se sirve igualmente. No tenía buenas experiencias con alcohol en el sistema, y también me recordaban momentos con Matt...

-¿Y sus padres...?

-Fallecieron. Los nuestros.-dijo tras darle un sorbo a el vaso y desviar su mirada penetrante de mi.

-Disculpa.-respondí un poco avergonzada de mi pregunta. En cuanto escuche un estruendo de madera indicando que Shaira había llegado por fin a casa de Seth.

-¡Bi!-exclamó aventándose hacia mi con las llaves de su carro en mano.-¡Viniste!

-No podía perdérmelo.-le respondí el abrazo mientras de reojo veía como Seth se tomaba su vaso de una vez, sin ni si quiera hacer una mueca por lo fuerte que era ese licor.

-Estaré en la pileta.-dijo amablemente, me sorprendía la verdad.-Si me disculpan. Y... Hola hermana.

Se fue con sus comisuras ligeramente levantadas sonriendo irónicamente no sin antes servirse un poco más de su licor.

-Disculpalo. Seth es así...

-No... tranquila.-respondí dispuesta a evitar su comentario de la noche anterior. El cual indicaba que estaba sobrevalorada.

-Supe que Matt se fue a Nueva York.-dijo con un hilo de voz mientras me dirigía hacia el patio donde este chico semidesnudo nos miraba mientras salía del agua.

-Si... se supone que lo estamos intentando. Y para serte sincera, va bien hasta el minuto.-respondí honestamente, aunque con una pizca de confusión.

-Que tal si me sigues contando en la piscina.-me guiño un ojo riendo mientras se iba a buscar unas copas.

Entretanto deslice la falda y mi suéter quedando en bikini en cuanto me fije que Seth no despegaba la vista de encima de mi, seguramente pretendiendo que yo me diera cuenta por su poca discreción.