Capítulo 15: El brujo y la carcel de cristal.

3.3K 462 66
                                    

Al salir de aquella casa Jimin solo sabía una cosa con seguridad.
Nadie tenía ni idea de dónde estaba Kim Seokjin. Claramente Suga se había encargado de él pero nadie lo había visto con vida en los últimos cinco años y si bien la mayoría quería creer que este era prisionero del impostor, otros creían que el mismo día que lanzó el hechizo sobre Yoongi, Suga lo asesinó, para que su plan no tuviera fallas.
Lamentablemente esa explicación era la que más cuadraba en toda la historia pero claro jamás se lo diría a su amigo.

Llegaron nuevamente al carruaje, Namjoon caminó hasta el bar donde debían de estar los guardias esperándolos.
Les avisó que volverían al palacio y los hombres los siguieron sin decir absolutamente nada.

Jimin llevaba en sus manos algunas cosas que había comprado de pasada por la feria, para de esta manera no levantar sospechas.

Llegaron al palacio y Suga esperaba en la galería principal encima de las escaleras. Sus ojos se afilaron cuando vio a Jimin bajar de su transporte.

-¿Conseguiste lo que buscabas?- preguntó sosteniendo el brazo del príncipe para detener su apresurado andar.

-Si, lo he hecho, gracias-

Suga le arrebató las bolsas de tela que llevaba y miró en su interior.
Encontró algunas botellas pequeñas que contenían diversos y coloridos líquidos, también algunas cremas y ropa interior.
Asintió con su cabeza y le devolvió las bolsas a Jimin.

Este lo miró con desprecio y continuó su camino hacia su habitación.

Jimin quería correr hasta el jardín secreto y contarle a Yoongi lo que había hablado con sus amigos, pero parecía que Suga no estaba dispuesto a darle tregua ya que se había paseado delante de la puerta de la habitación del príncipe varias veces.

A la hora del almuerzo el joven se disculpó alegando que se sentía mal debido a su naturaleza de doncel y por primera vez el emperador no exigió su compañía.

Por la tarde sintió un alboroto en el frente del palacio y cuando decidió ver que pasaba vio como Suga salía de allí montado en su caballo y escoltado por unos cuantos guardias.
Jimin sintió que era el momento para escabullirse y poder llegar a aquel jardín.

Salió de manera sigilosa, mirando para todas partes pero se llevó un gran susto cuando vio a Sumin parada frente a él.

-Jimin, necesito hablar contigo- dijo la mujer mirando a su alrededor.

-¿Qué pasa?- preguntó, -Estoy apurado- informó

-Jungkook- dijo la mujer en un hilo de voz.

Entonces Jimin la tomó del brazo y la arrastró hasta su habitación.
-¿Qué acabas de decir?- indagó con algo de temor.

-Jungkook es mi hijo- informó la mujer con un brillo cariñoso en sus ojos.

-¿Qué demonios?- gritó Jimin haciendo que la mujer tapara su boca con ambas manos.

-Asi es mi niño, Kookie es mi hijo, hace unos minutos se coló al palacio y me contó que te conoció y el motivo de tu visita a su casa. Yo sabía que eras bueno príncipe, lo sabía,- las palabras de la mujer estaban cargadas de cariño y esperanza.

-No lo puedo creer, tendrás que contarme esa historia pero ahora necesito de tu ayuda- explicó

-Claro dime qué tengo que hacer-

-Debo salir al jardín a buscar algo pero necesito que los guardias no me vean-

-Tranquilo el emperador no está, los llamaré para que vengan al comedor a relajarse un poco, te mandaré a Sejun para que te avise que puedes salir.

Un paseo por el jardín Donde viven las historias. Descúbrelo ahora