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-La información confidencial es... De un fenómeno encontrado en el planeta Marte. La NASA lo oculta todo para sí mismo por lo que quiero que el mundo sepa lo que ellos ocultan. Y no sólo soy yo, somos un grupo.

-¿Cuántos?

-El General de Rusia y su armada, la mayoría de los que están aquí. Somos invencibles, primor.

El testigo le dice a Mild.

-"Invencibles", me gusta cómo suena esa palabra. ¿Tus dedos serán invencibles?

-¿Qué? ¡No, no, no!

Mild deja caer el hacha rebanándole los dedos aunque un poco de sangre salpica en su rostro. El hombre grita sin control sujetando su propia mano. Mild revisa sus bolsillos en busca del USB. Lo toma y lo rompe al pisarlo.

-Tonta. ¿Crees que no hemos hecho una copia?

-¿Crees que no te voy a cortar otra extremidad si no me cuentas?- Mild vuelve a alzar la hacha amenazando una pierna al hombre.

-No lo vas a hacer. Sería demasiado arriesgado para ti.- El testarudo hombre que sangra por no tener sus dedos, vuelve a confiarse.

Mild truena los huesos de su propio cuello antes de cortarle la pierna derecha.

-¡AHHHH! ¡POR DIOS! ¿CÓMO PUDISTE?

-Ser amiga de una policía me da muchas libertades. Ahora habla, carajo.

Mild le pide.

-Lo tiene el General Ruso. ¡Lo tiene él!

-¿Dónde está él?

-En el centro militar de Rusia.

-... Gracias.

Mild le dice ahora llamando a una ambulancia mientras le da la espalda.

-¿Ambulancia?- Mild hace su mejor voz de aterrorizada. -¡Hay un hombre herido aquí! Un psicópata le corto las extremidades, ¡ahora viene a por mí! ¡AHHHH!

Mild se queda gritando mientras que lentamente retrocede el teléfono de su oreja antes de llevarlo frente a sus ojos y colgar. Ahí deja de gritar para poner su semblante serio y tirar el hacha a un lado antes de irse.

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Gulf regresa la nave pero ya es de noche y el departamento de NASA está cerrado. Los tres regresan al hotel cansados pero Jamie se despide de ellos a medio camino porque va a su habitación. La pareja acepta sus disculpas y van a su habitación.

Se tiran a la cama al lado del uno al otro.

-Estamos tan cansados que se nos olvido ir a recoger a los niños. Al menos Mild llamo para decirnos que están a salvo.

Gulf suspira totalmente agotado cerrando sus ojitos.

-¿Dormiremos con nuestros trajes de astronauta?- Mew pregunta. -Porque están sudados. Me da asco.

Él se va quitando su propio traje. Se queda en boxers y mira a su esposo.

-Quítate el tuyo.- Mew le dice.

-Estoy cansado.- Gulf murmura con sus ojos cerrados. Mew le baja el cierre del traje entonces. Él sienta a su esposo.

-Mew, dije que estoy cansado.- Gulf dice en un murmuro sin abrir los ojos pero el pelinegro le hace caso omiso y al menos saca los brazos de Gulf de las mangas. Lo empuja de nuevo a que quede acostado sobre su espalda y le quita lo que resta del uniforme.

Un Poco Monstruoso 3• MewGulfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora