-¡Tengo una gran idea!-Exclama Andrea.-¿Y si pasamos todos juntos el fin de año en la cabaña de mis padres?
Todos nos giramos hacia ella al escucharla. La verdad es que tiene muy buena pinta.
-¿Donde está?-Pregunta Daemon, que se coloca a mi lado, rozando su brazo con el mío.
-Aquí cerca. Es una pequeña casita en la que hay un sofá, una cama, televisión, calefacción y cocina. El baño es lo único que está apartado. El resto está todo en el mismo sitio.-Sonríe.-¿Que os parece?
-Yo me apunto.-Levanto mi mano y la agito ligeramente.
-Y yo.-Añade Daemon.
-Yo también.-Byron le da un beso en la mejilla a Andrea.-Fin de año es esta noche, ¿vamos haciendo las mochilas?
Asentimos y cada uno se dirije a su propia casa, excepto yo que ya estoy en la mía, claramente.
Subo las escaleras y meto en mi mochila un pijama y una camiseta de manga corta, ya que no es la primera vez que voy allí y siempre hace mucho calor.
Media hora después, todos estamos entrando en el coche de Byron, que emprende rumbo a la cabaña. Está nevando fuertemente, pero supongo y espero que pare cuando antes.
Poco rato después llegamos, y cuando aparca todos nos bajamos sin molestarnos en coger el equipaje. Ya lo haremos luego.
Entramos corriendo en la casa y veo que está como siempre; todo madera salvo los muebles, bastante modernos.
En la cama caben dos, así que los otros dos dormirán en el sofá.
-Es muy bonito, Andrea.-Dice Byron, sentándose en el sofá.-La nieve hace mucho ruido, pero es muy relajante.
-Gracias. Deberíamos ir a por las cosas, chicos, si no se hará tarde y tendremos mucho frío.-Responde ella, que se dirije hacia la puerta.
Gira la manilla, y todos nos sorprendemos al ver que no se abre.
-¿Que pasa?-Pregunto. Me acerco a la puerta e intento girar la manilla, pero la puerta no se abre ni un poco.-Es imposible abrir esto.
Daemon se acerca a la ventana y se inclina un poco hacia fuera. Suelta una maldición y se da un manotazo en la pierna.
-La nieve ha atascado la entrada. ¿Puedo salir por la ventana?
-No se abren las ventanas. En invierno tienen un cierre automático para conservar el calor. Solo podremos salir rompiéndola.-Responde Andrea asustada.
-¿Puedo romperla?
-Mañana se derretirá la nieve. Podemos esperar sin salir.-Anuncio.
Daemon se lo piensa un segundo y finalmente asiente.
-De acuerdo.
Suspiro y me dejo caer en el sofá. Tampoco es para tanto, tan solo tenemos que aguantar con la ropa que llevamos.
Me miro de arriba abajo y veo que llevo un pantalón vaquero y una camiseta negra fina, ya que en el coche hacía calor y nos quitamos los abrigos.
Puedo aguantar con la calefacción.
De repente, las luces se apagan.
Para que hablaré.
-¿Que demonios ha pasado?-Pregunto incorporándome de golpe.
-Se ha ido la luz.-Byron camina hacia el generador de electricidad y lo observa.-Si, se ha ido. Seguramente por la tormenta.
-¿Y la calefacción?-Pregunta Andrea esperanzada.
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Una irresistible casualidad
Teen FictionNim es una chica de quince años segura de si misma, con un caracter fuerte. Una tranquila noche está en su habitación cuando ve que un chico intenta colarse en su casa para que no lo pille la policía. Y lo más raro es que ella le deja pasar... <...