—Sakura—
Dulce Obito..
Él quiere casarse cuanto antes, supongo que es lo mejor ya que en unos meses más no entraré en un vestido. Intuyo que eso es justamente lo que pensó pero como es tan adorable no quiso decirme que pareceré una pelota vestida de blanco así que por esa razón y sutileza decidí que lo amo aun más..
—se supone que tienes que elegir algo atrevido mocosa ¿o si no que gracia tiene que te cases?!
—si, creo que tienes razón tía..
Obito insistió en que comprará un vestido de diseñador, dije que no y él fue con mi tía la "por supuesto sobrino de esta mocosa me encargo yo"
Llevo una hora mirando vestidos y ella siempre exige más y más.
Estoy por mandar todo al carajo, por que mi temperamento no es mejor estos días.
Y lo veo.. hermoso como ningún otro.
Simple y bello, estilo griego de un blanco alucinante.
—yo necesito ese vestido!
Pase de ser la chica no quiero nada a la chica "por favor! Es mío, mi precioso!"
Mi tía me mira con el ceño fruncido, pero cuando ve que estoy encantada omite sus característicos insultos.
Cuando me miró al espejo suelto un llanto bastante irritante, el embarazo ha echo estragos en mi personalidad, cada día estoy más sensible y cuando lloro Obito se desespera y llega con helado y caricias suaves.
—Dios mocosa, ese es.. tu de verdad te casarás..
Mi tía esta llorando! ¿Pero que mierda nos pasó?!
Ella compra el vestido y zapatos con la tarjeta de Obito.
Dios! Esas dos cosas equivalen a dos meses de mi sueldo!
Madara el padre de Obito no sólo es guapo, también es un caballero de esos de antes.
Él se ofreció a llevarme al altar en calidad de padre.
Debo decir que también llore.. lo se, estoy hecha un mar de lágrimas..
Sasuke fue a visitarme junto a Naruto, estábamos bromeando y el pelinegro me miró como lo hace siempre y dijo su típica frase de siempre "molestia", no se por que en ese momento sentí que de verdad era una molestia, entonces ¿que creen? Si, yo llore. Naruto jadeo, Sasuke palideció y Obito enfureció.
Estoy pensando que el día de mi matrimonio terminaré con los ojos hinchados.. pero por suerte siempre tengo a mi Obito, solo él calma mi llanto con sus caricias suaves y palabras dulces y cuando eso no resulta dice algo realmente estupido que cambia el llanto por la risa.
¿Como no amarlo?
—día de la boda—
Estoy a punto de sacarme el cabello de los nervios.
—¿donde mierda esta Obito?! -gritó enfurecida-
Hace 20 minutos que llegue con Madara solo para darme cuenta que él no había llegado!
Los chicos tampoco y pensé que quizás los bakas lo secuestraron o lo emborracharon!
Kakashi a tratado de calmar mi estrés, estoy en el altar, con todas las miradas en mi, nadie cree que él me dejara plantada ni yo, ¿pero donde demonios esta?
