Juego de Roles (1/2)

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Gracias a los cielos se acercaba un fin de semana muy largo, y era lo que había estado esperándo. No habría tareas ni ningún otra actividad, así que podría estar con Jericho todo este fin. No había podido dejar de imaginar cuantas cosas podríamos hacer

Jericho se removió a mi lado, me pregunto a donde habrá ido hoy. Pues únicamente llego a dormir, y se notaba muy cansada. La abracé pegando la más a mi y besé su cabello. Aspirando su aroma en el proceso. Me encantaba dormir de está forma con ella. Admirando su rostro tranquilo, sus párpados ligeramente cerrados, sus labios entre abiertos exigiendo me qué los despertará con un beso.

Al despertar Ban estaba dormido a mí lado, la verdad, no se en que momento vino a mi lado. Me había sentido exageradamente cansada y solamente llegue a dormir. Apenas diciéndole 'hola'. Se me antojo despertarle, pero se veía tan lindo dormido que no pude hacerlo, mejor lo seguí admirando. Mientras lo admiraba el sueño volvió a vencer me.

Para cuando desperté él me miraba, con ese brillo que aún no lograba descifrar. Sus ojos tan iluminados y esa hermosa sonrisa

-Buenos días-. Le sonreí

-Excelentes. Me dijo y se acercó a mis labios para darme un besó. De un hábil movimiento se posicionó sobre mí. Se separó unos centímetrosde mi cara y sonrió. Con su mano apartó un mechón de mí cara -¿Sabes?-. Me dijo en un susurro -podría pasar el resto de mi vida así.

-¿En esta posición?-. Pregunté algo confundida

-No. Contigo a mi lado cada mañana-.

-Deja de bromear; Ban-. Estaba completamente roja, podía asegurarlo sin siquiera mirarme, pues la cara me ardía.

-No es broma-. Me aseguró -Creo que deberíamos dar el siguiente paso

¿Siguiente paso? Mi corazón empezó a latir frenéticamente, el en verdad pensaba algo serio de lo que teníamos, tan así para pensar en dar otro paso.

-Y ese cual sería? Hace un par de años que vivimos juntos-.

-Claro, pero no hace mucho que dormimos juntos en la misma cama-. No supe cómo rebatir ante eso, simplemente sonreí

-Voy a preparar el desayuno-. Le avisé

-No. Hoy quiero hacerlo. Hace tiempo que no cocino -
Ban se levantó y camino a la puerta. Pude observar su espalda, el era tan sexi sin camisa y eso que no era mucho de hacer ejercicio, aun así, tenia el mejor cuerpo que había visto en mi vida. No era que hubiese visto muchos, contaban más los famosos y algunos compañeros cuando hacían ejercicio. Aun así
simplemente ese hombre me parecía perfecto.

-¡Controlate Jericho!-. Me levanté a darme un baño y después fui a la cocina, luciendo un vestido corto floreado. Leí el mensaje en mi móvil, la mayoría eran de mi madre. Di un largo suspiro antes de arrojar el teléfono al sofá e ir con Ban.

Ban traía puesto un mandil muy gracioso. En color rosa con un enorme corazón en el centro y holanes en sus orillas.

-Ya esta el desayuno-. Me avisó, para después
Ambos sentarnos a comer.

-¿Porqué no te has quitado eso?-. Pregunte divertida

-Tal vez quiera jugar un rato

No hice más preguntas y me dediqué a comer

-Ban...-. Le llame algo insegura

-Dime...

Respiré profundamente antes de decirlo. Aunque ni siquiera estaba segura de querer decírselo. -Mi madre quiere conocerte-. Ya lo había dicho y había sido más difícil de lo que pensé

COMPAÑEROS  (reto 30 días +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora