Tower Defense World (Es)

C38: "El demonio"

Ella decidió aprovechar su nueva apariencia debido a la opción bebida para ir a la escuela que había fundado en calidad de estudiante.

Esta surgió tras intentar crear una Torre combinando todas las magias conocidas, surgiendo un edificio donde podías aprender caso cualquier cosa; en ella habían bolas de cristal de las cuales podías obtener información sobre lo que querías saber. Cada una contenía una información determinada, estas no podían salir del edificio ni ser aparcadas por una persona durante mucho tiempo.

Esto permitió que se crearán aulas donde se compartiera una esfera y se debatirá sobre lo que cada quien entendio, aprensiendoae mucho más de lo que se haría sólo. También pasaba lo mismo pero con las profesiones, siendo un edificio adaptado para las necesidades de aprendizaje de cada una; rodeando al que tenía las esferas.

Enfrente a esto se construyó un coliseo para poder practicarle en combate, desafiandose las personas entre ellos en cpmbate; pero siempre de manera amistosa y no a muerte. Esta escuela tenía un edificio residencial para los que vivieran lejos de ella, permitiéndoles a muchos poder tener más fácil el asistir; además que sobre el territorio construyó muchas de estas.

Mientras miraba la flor de la juventud con una sonrisa, una persona le llamo la atencion; ella volteó a ver y le extraño que fuera de la tribu demoníaca. Ella se preguntaba ¿Porque la estaba buscando?, además que el sabía quien era ella; sólo un p3queño grupo de gente conocía su nueva apariencia.

-¿Asi que eres tu quien forjó este imperio?- dijo el hombre frente a ella, este no era muy diferente a un humano físicamente; salvo por la cola, alas y cuernos de demonio. Además que su iris era rojo, en su boca se podían ver salir unos colmillos; lo demás era un saludable y joven cuerpo.

El tenía pelo negro y era realmente alto, sus ropas combinaban con su pelo; le daban un luck como de play boy. Ella se quedó un poco babeando al verlo mientras asentía en forma de respuesta.

-Bien iré al grano- dijo con un tono cansado- necesitamos que vengas a nuestro imperio a construir una Torre, pero nose como te haga esto sentir- esto último lo dijo en sarcasmo ellos le habían dado un valioso regalo, sabiendo como era ella era obvio que se viera en necesidad de pagarles con el mismo favor.

Ella noto esto y entendía que eate tipo no tenía el mejor de los humores asi que decidió ir a terminar con el asunto rápido, así que asintió y se acercó a él; indicándole que liderará el camino.

-¿Te puedo preguntar algo sobre la opción que bebí?- le dijo ella.

-Adelante pregunta, pero no te garantizo una reapuesta- como si el hecho de hablar le colmada la paciencia.

-¿Sabes cuanto tiempo viviré ahora?-dijo ella un poco preocupada.

-jajaja típico de humanos y su vanidad, mira almenos te mantendrá como quinceañera hasta tu cumpleaños 800; luego tal vez empieces a envejecer- pensando que a ella le pregunto preocupada por su apariencia y por cuánto le duraría.

Sin embargo el la vio con una mirada de muerta en vida y mo entendía porque el de su actitud, ¿Acaso ella no quería vivir y ser bella?. El se sintió un poco incómodo debido a esto, parece que había prejuzgado mucho a esta persona.

Ellos se fueron al imperio de el y varias tropas de Unión los vigilaban en las sombras, temian que en su imperio tratarán contra ella; sin embargo ella era más fuerte que todas las tropas juntas por lo que eran inecesarias. Sin embargo esto no lo sabía su enemigo, este demonio no se incómodo de esto; dejando que hagan lo que les parezca.

Sólo haría un movimiento si ellos hacen el suyo, el se reía pensando en la patética pelea que estos le darian; pero temía en las represalias que le traería en conjunto si decidían vengarse. La fuerza de Unión no es algo que desestimar, por suerte no son injustos si alguien se lo busca ellos no lo vengan; pero duda que sea asi con ella.

El sabe que ella es una figura importante, una Maga sin igual seguramente tenga una gran fuerza propia; por lo que la miraba con respeto. Sin embargo no había nada más que apreciar, después de todo el odiaba a los humanos; ella sólo se ganó su respeto por su fuerza y sus logros.

Pero no le daría nada más depsue s de todo los Humanos suelen cambiar, aveces sólo ocultan su verdadera cara y eso es lo que el teme; lo único que se sabe es que no debe provocarla. Ella es bastante tranquila y fácil de tratar, nunca niega una mano si es que se la necesita; más aún si antes se la ayudo.

-Muy bien masomenos aquí necesito que hagas una Torre de Sangre- dijo el tras guiarla a un lujoso castillo.

-Ok- le respondió ella, el le iba a empezar a hablar acerca de que necesitaba que le trajeran para hacerla; pero no pudo hacerlo. Ella tras decir Ok la había construido.

-¡Oye que acaso estas loca!- le dijo el del susto- ¿Acaso quieres que nuestras torres se peleen o que?

-¡De que mierda me hablas no era lo que querías!- le respondió ella del susto. El entendio que ella actuó sin pensar y le dijo.

-¡Maldición!, rápido si no quieres que nuestras torres entren en guerra acepta su union- a lo cual aceptó sin saber que estaba pasando y el le explico.

-Bien normalmente se requiere de un vínculo previo para poder construir una Torre, si no hay uno está va a empezar a ser atacada como un enemigo; el problema es que estos ataques son a tu Torre en espíritu. Lo cual es absolutamente mortal- el hizo una pausa mientras se daba un palmado en la cara, el tuvo que actuar rápido para evitar que las torres en su reino la mataran.

Esto no era algo que la Unión fuera a permitir por más que ella lo causó, probablemente dirían que el no le advirtió a propósito.

-¿Qué consecuencias hay al vincular nuestras torres?- dijo ella y el se dio cuento que salió de un lío y se metió a otro probablemente peor.