Vaya presentación.

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Seonghwa y Yunho se resignaron y esperaron pacientemente los 5 minutos que bastaron para tener a toda la tripulación frente a sus ojos, que, para ellos dos eran: "Pirata enano que ha robado nuestro barco y nos hace chantaje", "el que nos dejó inconscientes","el que esperó a que despertáramos para decírselo al capitán", "desconocido1","desconocido2","desconocido con cara de enfado 3" respectivamente.

—Capitán, si me permite la osadía, me gustaría preguntar qué hacemos aquí.— Dijo uno de los muchachos de la fila que habían formado frente a Seonghwa. Ahora que los veía de cerca, parecían chicos realmente jóvenes, no debían pasar los 20 años. Inquietante.

—Con gusto responderé a esa pregunta. Tripulación, están todos aquí reunidos por el mismo motivo: Preséntense ante los nuevos marineros a bordo, pues a partir de hoy formarán parte de la tripulación. — Dijo el de cabellos color amanecer, esperando a que los grumetes hablasen.

—¿Cómo que estos mindundis van a ser parte de la tripulación?— Se quejó un chico de cabellos oscuros y voz gritona, con el ceño fruncido y adoptando una postura de brazos cruzados, dejando claro que estaba en contra de ello.

—Lo que escucha ¿Tiene problemas con la sordera, o con el cerumen acaso? Es una orden, esos dos "mindundis" se quedan en el barco, y de hecho, pensaba que tal vez usted podría enseñarles el navío en vez de limpiar los cañones, pero si no quiere siempre puedo ordenárselo a...— El capitán comenzó a mirar a sus marineros uno por uno.

—Capitán, no me molesta para nada enseñarles el barco, pero comprenda que aún estoy sorprendido y por eso mi reacción, le ruego me perdone.— Se retractó el mismo joven, que antes tenía sus brazos cruzados, cambiando ahora de posición y de expresión facial.

—No esperaba menos de usted, pero ahora lo que más os urge es presentaros. Como es debido, si es posible, recordad que ahora son como nosotros, y por ende, estaría contento si veo que los tratan como a cualquier otro caballero de esta embarcación— Dijo el capitán, mas Seonghwa pensó para sus adentros si llamarlos caballeros sería lo correcto, ya que hasta ahora lo único que habían demostrado era que los que estaban a bordo de aquel navío –antes de que los dos amigos llegaran de forma forzosa– eran unos piratas en todos los sentidos, unos bárbaros, unos salvajes sin clase  y sin, por supuesto, modales. Por no hablar de lo sucio que juegan, claro está.

—Comiencen a presentarse, se lo ruego—Dijo el tripulante mayor de ese navío.

—Disculpen por esta forzosa bienvenida, mas mi nombre es Jongho;con apellido sin importancia, si disculpan. Mi cargo en este barco es ser el segundo mayor tripulante al mando, algo así como el sustituto de nuestro capitán. Deberían saber, por cierto, que en este navío nos regimos por rangos. Mi rango es 4,8/5; por debajo del 5 sobre 5 de nuestro capitán.— En ese momento, Jongho le extendió la mano al de cabellos oscuros para completar el saludo con un amistoso apretón de manos; lo mismo hizo con su amigo a su izquierda.

—Bienvenidos, muchachos. Que no os engañe Jongho, aunque parezca muy maduro y serio, es como un pastelito de canela, por no decir que es el más joven abordo. Lamento nuestro violento comienzo. Mi nombre real es San, Choi San para ser más precisos. Realmente lamento mi primera impresión ante ustedes y les ruego me disculpen por aquel incidente.— Dijo el sonriente chico de cabellos blanquecinos a la vez que ofrecía su mano derecha para dar un apretón de manos a ambos y, con este gesto, enterrar el pasado. Sin embargo, en esos momentos, Seonghwa y Yunho ya le habían perdonado todo al ver su angelical sonrisa.

El siguiente en presentarse fue en efecto, el chico de voz gritona, piel clara y cabellos oscuros; que, con esfuerzo escupió:

—Ustedes verán, no quiero ser grosero en su primer día, por eso, quería disculparme por tratarlos así hace unos instantes. Me preguntaba si aceptarían esta disculpa, pues no lleva ninguna mala intención por si eso pensaban.—Dijo el mismo chico que les acompañaría a ver el barco más tarde. Yunho, con una sonrisa –aún más angelical que la de Choi San– se adelantó a su amigo, perdonando instantáneamente al de voz chillona.—Bien, en ese caso; –dijo el de esbeltos rasgos– mi nombre es Wooyoung, mi rango es 3/5 y soy el supervisor a cargo del barco. Lo que significa que si hacéis algo indebido, seré el primero en saberlo y avisar a Jongho o al capitán.— Dijo con una sonrisa ¿Diabólica? Este muchacho empezaba a poner a Seonghwa nervioso.

Su mirada daba, como poco, pavor. Como si algo te dijera que como él te mirase, estarías muerto en menos de lo que canta un gallo. Algo le decía a Seonghwa que el tal Wooyoung sabría pelear magníficamente, aunque seguramente de una forma más mediocre que sus superiores, claro está.

No hay destino que valga || [Seongjoong]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora