"Los buitres eran inteligentes, eran ágiles y atacaban a su presa sin ninguna pizca de arrepentimiento. Quizás debía acatar unos aspectos de la personalidad de los buitres".
Harper Gardner estiraba su cuerpo después de tomar una pequeña siesta. Le parecía extraño, ella no recordaba haber ido a dormir, o siquiera estar en su casa. Volvía a estar aliviada, sus piernas se podían mover con libertad y, para su mala suerte, el dolor también lo podía sentir, aunque este dolor sí era soportable a comparación del que pasó cuando estaba en la apoteca.
Abrió los ojos e inmediatamente observó un techo que sin duda alguna no era el que pertenecía a su habitación. ¿Qué estaba pasando?
Intentó levantarse, pero tenía un fuerte dolor en las articulaciones que se lo impedía. No obstante, necesitaba saber en dónde estaba, así que observó toda la habitación en busca de un indicio que pudiera ayudarla. Era un cuarto sencillo, tenía una cama y una mesita de noche, también había una silla y justo arriba de ella, colgando en el techo, había un adorno emplumado.
Lo miraba con atención, el objeto daba algunas vueltas, que supuso, eran en consecuencia del viento que circulaba en la habitación. Las plumas eran de muchos colores; azules, amarillas y rojas eran las que la chica alcanzaba a ver desde ahí abajo. Era un adorno exótico, pero también, lindo.
—Es un atrapasueños. —Volteó hacia la puerta, ahí estaba Miles. Se acercó a ella con algo en las manos—, ¿te gusta?
Rápidamente se reincorporó y apoyó la parte superior de su cuerpo en la cabecera.
—¿En dónde estamos?
Ignoró lo que dijo Miles. A Harper no le parecía que fuera el momento para hablar de gustos estrambóticos.
—En mi casa. —contestó él.
La joven miró a su alrededor, eso parecía tener más sentido, pero seguía sin entender un par de cosas que su subconsciente respondía con teorías anormales.
—Y tú dormiste en... bueno, ya sabes...
—No —interrumpió—, obvio no... dormí ahí. —Apuntó hacia la silla, que tenía encima una cobija doblada.
Se sintió aliviada de inmediato, pero no tanto como creyó que sería. En realidad, Harper quería tener la mínima esperanza de que él había dormido con ella, abrazados, sintiendo el calor del otro. Si hubiera sido así, él se habría encargado de ahuyentar sus pesadillas y demonios internos, él la habría cuidado. Sus sentimientos por Miles siempre fueron borrosos, desde que se vieron por primera vez en el basurero, la muchacha no supo qué sentir; pero en ese momento, después de tantas cosas que habían pasado juntos, lo único que quería era que él la protegiera, que la cuidara del mundo, mientras ella se encontraba en sus cálidos brazos. Eso era lo que más quería.
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La ciudad del olvido [Ciudades #1]
Science Fiction«No se le puede llamar vida a una existencia sin arrepentimientos» (Sinopsis en el interior). --------------- •Magnifica portada hecha por @Mechula03 🥇Primer lugar en la sección Estrella de los "Latina Awards 2021". 🥇Primer lugar en la categoría c...