Viviendo con The Vamps [Editando]

Capítulo 92

-Jack, ven anda.- dice Connor mientras estamos en el salón.

A él ya se lo han hecho y ha salido medio llorando y eso que he estado cogiendo su mano y tranquilizándole, pero nada.

Estoy tumbada boca abajo y sin la camiseta, nos vamos a hacer los dos el tatuaje en la parte de atrás del cuello y literalmente estoy acojonada.

-Cuando quieras empiezo.- me dice la chica tratando de tranquilizarme.- No duele nada, yo llevo medio cuerpo tatuado.

-Tú eres muy resistente.- le digo bromeando.

-¿Qué pasa amor?.- dice Jack cuando entra.

-Quiero que estés aquí conmigo.

-¿tienes miedo?:- dice riendo

-Un poco.- le respondo.

Jack se ríe y se sienta en el suelo cogiendo mis manos por debajo del sillón.

-¿Empiezo?.- me pregunta la chica.

-Si.- respondo respirando hondo.

Son dos palabras y creo que nunca me han dolido más dos palabras, incluso duelen más que: tenemos que hablar y eso que está famosa frase tiene tres palabras.

-Tranquila.- dice Jack cogiendo mi mano y me sonríe, Connor coge mi otra mano, creo que tengo lo que más quiero en cada una de mis manos en estos momentos.

Media hora sufriendo por dos estúpidas palabras en el cuello. Que dolor joder.
Salimos del salón los seis juntos, Connor va más contento que unas castañuelas y yo aún voy quejándome.

-Yo no me hago ningún tatuaje más.- digo.

-Eres una quejica.- dice James riéndose.

-¿QUIERES QUE TE TATÚE LA ENTREPIERNA?.- le digo a James riéndome.

-Vale.- me responde riéndose.

Le doy una colleja y me río, nos separamos de los chicos y Jack y yo nos vamos cogidos de la mano a lo nuestro, me abraza por la cintura y me sonríe.

-¿Cuando voy a poder verlo?

-En dos semanas.- le respondo antes de darle un beso.

-Vale.- responde mientras seguimos caminando.

-¿Puedo raptarte este fin de semana? Para qué sólo seamos tú y yo.- me dice.

-De acuerdo.- le respondo sonriendo.

-¿Dónde quieres ir?.- me pregunta.

-Dónde tú quieras.

-¿A mi cama?

-Idiota.- digo riendo sin parar.

-Era una opción. Ali me está ayudando con una sorpresa para ti.- me dice.

-Me lo acabas de decir, ya no es una sorpresa

-Si lo es porque aún no sabes lo que es.- dice sacándome la lengua.

- Pues llamo a Ali y le pregunto.

-No conseguirás saberlo.

-Si lo conseguiré. Siempre consigo todo lo que quiero.

-¿A mi también?

-Si:- digo antes de darle un beso.

El se ríe, me abraza por la cintura y nos vamos hacia su casa. Cuando llegamos lo hay madura que raro porque normalmente Finn está en casa comiendo o tirado en el sofá.

-¿Dónde está Finnegan?.- digo riéndome.

-Jugando al tenis con mi padre.

-Que bonito el amor familiar.