La pelirroja del Sweet Amoris [PAUSADA]

1.- Llegada al Sweet Amoris

Una pequeña peliroja acababa de llegar a la ciudad. Vivía con sus padres en un pequeño apartamento, a unos 10 minutos de un precioso instituto, frente al que estaba, acompañada por su protector padre, que tenía que entregar unos últimos papeles.

La directora estaba esperándolo con su aspecto amable y su moño bien hecho. Al verlos se acerco apresurosa a ellos y les estrechó la mano.

- Bienvenidos al Sweet Amoirs, usted debe ser Gabrielle ¿Por que no va a conocer el Instituto mientras su padre y yo arreglamos unos pequeños detalles? -dijo la directora , mirando a la peliroja-

La pequeña asistió con una dulce sonrisa y, mientras ellos entraban en el despacho de la directora, ella se fue al patio, que era la zona que más le gustaba. Caminó un rato por esté hasta que empezaron a salir algunos alumnos del edificio, debía ser la hora del recreo.

Su padre también salió y fue a despedirse de ella, diciéndole que todo estaba arreglado y que se podría unir a las clases después del recreo.

Gabrielle se fue a un rincón del patio, donde se puso a escuchar rock con su mp3, mientras veía a los alumnos hablar entre ellos.

Al poco rato sono el timbre, anunciando el final del recreo. La pequeña se levantó al ver que todos iban hacia el edificio y buscó durante un rato su clase, hasta que un chico albino se acercó a ella, la profesora lo había enviado a buscarlo.

- ¿Cómo te llamas? -le preguntó al chico, no parecía muy hablador.

- Me llamó Lysandro -la miró con una sonrisa, tendiéndole una mano- ¿Y usted, señorita?

- "Vaya, que educado es" -pensó la peliroja, estrechando su mano- Me llamo Gabrielle

Al momento ambos entraron en la clase y la profesora le indicó a la chica que se presentará ante la clase.

-Me llamo Gabrielle, es un placer conocerlos a todos -dijo, mirando a la clase con una dulce sonrisa inocente en sus labios-

- Bien, siéntese en aquel sitio, junto a la ventana -le indicó la profesora mientras señalaba un asiento vacío junto a un chico pelirrojo de ojos grises.-

Las clases pasaron de forma lenta y aburrida, mientras el chico albino no le quitaba los ojos de encima, igual que una rubia, pero la mirada de la chica reflejaba odio. Genial, ya tenía una enemiga...

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¿Y bien? ¿Qué les pareció?
Espero que os haya gustado :3
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¡¡Besitos de Melón!!