Puedo con esto

Capítulo quince (Final)

Island se estaciona frente a su edificio. No decimos nada por un par de minutos, sólo vemos al frente como pensando en todo lo que está ocurriendo. Se le nota agotada, creo que no ha dormido desde la desaparición de Austin, con sinceridad yo tampoco lo había echo y aunque fue poco lo que logré dormir, fue suficiente para reponer algunas baterías.

La mente no se detiene, las ideas y posibles escenarios de lo que está pasando o podrían estar pasando Austin vienen a mi cabeza y me atormentan, supongo que lo mismo pasa con Island y Collins, es simplemente una tortura.

No dejo de pensar en Collins, en Valerie, en Sophie y en Raymond, en lo que debe estar sintiendo con la desaparición de su hijo, hermano y novio.

Island ha tomado una actitud más sería de lo que pensé. Fui a su departamento con la idea de que iba a encontrarla llorando o algo similar, pero no, estaba buscando la forma de encontrar a su amigo, viendo como ayudaba en lugar de quedarse con los brazos cruzados y hundirse en un mar de llanto.

La miro justo en el momento preciso en que una lágrima se le escapa de su ojo y no contiene más el llanto.

Suelta el volante y se lleva las manos a su rostro donde comienza a llorar sin contenerse, dejando salir todo lo que ha tenido que reprimir por hacerse la fuerte.

Desabrocho mi cinturón y bajo del auto, voy hasta su puerta y la abro, quito su cinturón mientras ella sigue en la misma posición sin moverse. Esta gimoteando y cuando tomo su rostro para que me mire, sorbe su nariz, lo cual me hace verla tan indefensa y adorable.

-Ven, Issy - la tomo de la mano y hago que baje del auto. - Vamos arriba para que descanses. Necesitas hacerlo.

Ella no pone objeción y se deja guiar por mi hasta estar frente a su puerta. Íbamos lento, tomados de la mano por el pasillo luego de salir del ascensor, donde sólo hubo silencio.

Al estar dentro del departamento, le busco un poco de agua para que se relaje un poco más. Ella esta tirada sobre el sofá con todo su rostro melancólico. Sus mejillas están llenas de caminos distintos de lágrimas, sus ojos están rojos, sus labios hinchados y su nariz roja.

-¿Quieres te prepare algo? - le pregunto cuando le entrego el vaso con agua.

Ella niega tomado un poco de agua.

-Quédate conmigo.

-Eso haré - me siento a su lado y paso mi brazo por encima de sus hombros, ella se acerca más a mí para acurrucarse en mi pecho mientras la siento suspirar. - No me iré a ningún lado.

Siento como su pecho baja y sube mientras llora deprimidamente. Siento como las gotas de agua caliente mojan mi camisa. Acaricio su cabello y dejo que suelte todo.

-Es mi culpa, Zack - su voz está más ronca y casi no puede hablar. Me preocupa lo que dice, nos separo al oír tal estupidez y hago que me observe.

-¿Por qué dices eso?

-Austin salió a la calle para darme mi teléfono ¡Yo dejé mi estúpido teléfono! - grita molesta y zapateando fuerte el suelo - Nunca dejó mi teléfono ¡Nunca! - vuelve a gritar y a darle golpes al mueble con furia.

-Island, escúchame - le tomo la cara y hago que se medio tranquilice, está con su respiración agitada, su pecho subiendo y bajando. - Le pudo haber pasado a cualquiera.

-¡Austin no es cualquiera! - réplica quitándose una lágrima antes de que llegue a la mitad de su mejilla.

-También es mi mejor amigo, Island - mis palabras hacen que ella me mire y siento como se arrepiente de haberme dicho aquello.