Capítulo 19: No es casualidad.

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⚜️

Mi sistema nervioso se activó en cuanto escuché las palabras de mi padre, no quería hablar, no podía hacerlo aún. Comprendí las palabras de María José al sentir un terror enorme recorrer mi cuerpo, el miedo al rechazo se instaló en mí, miedo a decepcionar a la única persona que deseaba se sintiera orgulloso de mí.

-Te haré una pregunta y me la vas a responder con la verdad. -Rompió el silencio. Su voz se mantenía seria, un tono que nunca había utilizado conmigo. -¿María José era la persona con la que te escapabas en Colombia? -Me paralice. ¿Cómo es que él lo sabía? ¿Kim le habría contado? -Responde, Daniela.

Daniela. No recordaba cuando fue la última vez que me llamó así, si es que algún día lo había hecho.

-Sí, padre. -Suspiró.

-¿Por qué tienes miedo? -El tono dulce con el que siempre se dirigía a mí volvió, al igual que un poco de mi calma.

-Porque no sé que es lo que pienses de mí, padre.

-Papá, dime papá, suena más bonito, mi ratona. -Abrió sus brazos invitándome a refugiarme entre ellos, lo hice. Amaba sentirme protegida por él. -¿Te hace feliz? No importa de la manera que sea. ¿Poché te hace feliz? -Asentí. -Eso es lo único que a mí me importa. Será nuestro secreto. Ahora, necesito que estés tranquila, mi amor. Si se suspende el paseo, puedes espiarla en el taller, Laura conoce las puertas ocultas de palacio. -Besó mi frente. -Por cierto, no fue muy inteligente de su parte creer que no habría seguridad rodeando todos los alrededores del hotel.

-Sobre eso, majestad. -Susurró Laura apenada.

-Está bien, Laura. Dani fue muy feliz allá y siempre se mantuvo tranquila ¿No es así? -Asentimos. -Ahora les deseo mucha suerte tratando de calmar a Poché, se ve que es alguien difícil. Suerte, ratona, yo sé lo que te digo, tengo experiencia gracias a tu madre. -

-Espere ¿Usted? -Laura lo señaló.

-¿Yo?

-¿A qué se refiere?

-¿A Dani no le gusta Maria José?

-¿Qué? -Abrí mis ojos como platos.

-¿Estoy mal? -Preguntó confuso.

-No, no, es solo que...-

-Entonces sí te gusta. -Su carcajada retumbó dentro de aquellas cuatro paredes. Había hablado de más. -Ahora entiendo porqué Felipe nunca te hizo hacer esos ojitos de borrego que pones cuando ves a Poché.

-¡No, papá!

-No lo niegues.

-No sé de qué hablas. -Me ruborise.

-¿La escuchaste, Laura?

-Yo solo logro escuchar un Me encanta Maria José, me tiene loca.

-¡Buena esa! -Golpearon sus puños hundidos en una carcajada.

-¿Papá, te sientes bien?

-¿Pensabas que también soy un amargado como tú mamá? -Sonrió -Soy un rey, mi amor, no un robot. -Besó mi frente de nuevo. -Juli ya me habló de su plan, cuentan conmigo para lo que necesiten, ratona. Quiero que te quede una cosa muy clara.

Un Corazón Para La Realeza.-Calle y PochéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora