Extra 1. Un nuevo comienzo

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-¡Toshio! ¡Se nos hace tarde!-Grito su alaraca hermana haciendo de despertador. Se sentó en la cama estirándose.-¡Boke!

-¿Podrías... dejar de gritar?-La chica giró los ojos y se sentó cruzada de brazos. Miró el reloj.-Aún Es temprano... ¿que quieres?-La azabache infló las mejillas.

-esto... no quiero ir-Confesó-¡Además, si no te despierto ahora no podré hacerlo después!-Grito molesta.

-Deja de gritar por favor-La azabache agachó las cabeza y asintio.

-Lo... lo siento-Dijo recuperando su semblante serio... idéntico al de su padre.

-Yo tampoco quiero ir-Confesó recostándose nuevamente en su cama.-No me interesa que todos nos miren como infectados.-La mayor rio, su hermano siempre era oportuno con sus ocurrencias. La hacían sentir mejor.-No podemos darle más vueltas. Además ¿quieres jugar o no?-Asintio rendida recostándose en la pared aun sentada en la cama.

-No quiero que papá nos de otro de sus "discursos"-El menor asintió.

-Mientras más rápido nos alistemos... tendremos la posibilidad de que ambos estén trabajando y así lo evitamos-Ella le dio razón. No es que no quisieran a sus padres; los amaban. Pero... su reputación los precedía.-¿Que esperas? Vete ya-Dijo empujándola ella miró soprendida al alto pelinegro.

-Oye. Soy 12 minutos mayor que tú-El giró sus ojos oscuros y despeinó a la ojiazul.

-Y Eso que. Apresúrate.-Ella rio y salió de su habitación dirigiéndose con sigilo a la de ella donde se alistó finalmente. Su cabello lo sujetó en un recogido algo deshecho con mechones lacios escapando y su fleco sobre la frente. Se colocó el uniforme suspirando pesado. Las siglas de Karasuno relucían sobre su pecho. Se cruzó de brazos. Era su primer año... hoy se presentaría al equipo junto con su hermano. Pero... ¿por que Karasuno?
Tocaron su puerta y abrió con sigilo reconfortándose de que era Toshio el cual pasó y se tiró a la cama de su hermana.

-Me sorprende lo vago que eres...-El la ignoró acercándose.

-Cuando estás en ese humor... es por que estás preocupada. ¿Te preocupa lo del equipo?-La chica se cruzó de brazos dándole tiempo a el de apreciarla, no entendía que le veían todos de bonita, bueno; tal vez sus ojos azules, el cabello peliazul oscuro y su fino cuerpo... si era muy bonita. Pero disfrutaba de hacerla enojar negándolo.

-Claro que no. Me molesta que nos separen... siempre hemos entrenado juntos-Mencionó con una mueca, su hermano rio y apoyó una mano en su hombro sonriendo.

-A mi me emociona. Asi ambos avanzaremos por nuestro propio camino. Además mama menciono entrenar con el equipo masculino una temporada...-Dijo pensativo se dio la vuelta y miró el escritorio de su hermana.-¿Tienes lima?

-Si, en El Cajon-Dijo y se tiró a la cama jugando con uno de sus balones. Incluso en primaria los hermanos entrenaban juntos, armaban jugadas espectaculares y además... no le gustaba estar sola... su hermano era increíble para apegarse a la gente, lo querían con facilidad, era efusivo y energético. Sin mencionar que era guapo y bastante alto... hizo una mueca. A ella siempre le costó acostumbrarse a lo nuevo, "integrarse" en realidad. Más ahora que los estaban obligando a ir a Karasuno. Se tranquilizó de saber que por lo menos tendría a sus amigos de la infancia ahi, claro que algunos eran un poco mayores pero al menos la conocían; técnicamente se habían criado juntos siendo sus padres amigos desde la preparatoria y se sentía cómoda entre ellos. Miró a su hermano el cual estaba sentado con tranquilidad en el suelo mientras arreglaba sus uñas.-Deja tus uñas en paz un momento-El giro los ojos.

-Quiero armar bien hoy. De todas formas eso definirá si entramos al equipo. O no.-Ella chasqueó la lengua.

-Nos aseguraron esa entrada hace tiempo-El menor arrojo con precisión la lima a la frente de la chica.-¡Oi!

¿Rivales?                                Kageyama Tobio y tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora