LAS CRÓNICAS DE BOWSETTE

CAPITULO 40: MÁXIMA CONCENTRACIÓN

Narra Bowsette:
*Suspiro* Ummm... Bueno, esto no ha sido nada sencillo de llevar, miles de veces me he recriminado a mi misma falta de coraje y más ovarios para avanzar con más seguridad y tranquilidad.

A lo largo del recorrido he pasado por muchos altibajos y las cosas se están poniendo cada vez más intensas y la pendiente es más alta y vertical.

El recorrido y los enemigos a veces me ponen la situación muy cuesta arriba. Sin embargo no debo permitir que las circunstancias me ganen, no a mí, a la Reina Bowsette no la puede derrotar nadie, la Reina Bowsette jamás puede tirar la toalla.

Que pensaría mi antiguo yo; creo que jamás hubiese permitido que se me rebelaran tan fácil, se hubiera cargado sin piedad y compasión a todo el que se entrometiera.

Ese es el empujón extra que necesito para ir con todo en lo que me resta de recorrido, aunque debo reconocer que ha medida que ha pasado todos estos tiempos, el amor y cariño del fontanero ha reducido ciertamente mi maldad y ganas de asesinar a lo loko, creo que el ha abierto una sensación nueva y especial que solo el y JR me hacen sentir.

Además de todo esto, a pesar de que me lo recuerde a cada rato, siempre me pongo a pensar en lo raro y peculiar que es esto; encontrarme en esta situación, dónde me toca tirar de orgullo y hacer el papel de buena por recuperar a Mario, el que siempre evito mi dominio maligno antes.

*Suspiro y notorio sonrojo* Ese bigotúdo tonto... UFUFU... Cómo fue que llegó a ser tan importante y especial para mí vida, ya ha pasado un buen tiempo desde el día de la Vendetta, donde pasamos un gran día, el primero de varios que hemos disfrutado a lo largo de todo esto.

Además nos conocemos uno al otro, demasiado diría yo... Algo que me ha hecho reflexionar y pensar una cosa que tal vez no llegue a notar en su día, pero que es curioso; el y yo en medio de nuestra rivalidad llegamos a compartir más tiempo incluso que con Peach... El siempre la veía luego de nuestras peleas, yo siempre la veía solo cuando me preparaba sus pasteles o para otra cosa.

Después del rechazo, en el que ambos decidimos tirar la toalla y dejar de lado nuestras múltiples peleas y desmanes hechos por nosotros en diferentes reinos, muchos de ellos de los que ahora tratamos de proteger, fue que empezó nuestro verdadero vínculo; no solo nuestra rivalidad, algo que fue más allá de lo que ni siquiera imaginamos.

Se me hace logico pensar que es por la supercorona, porque ella cambio todo en mi, hasta mis hormonas y personalidad, pero aún mantengo la misma mentalidad de toda la vida, y eso no me lo quita nada jamás.

UFUFUFU, a veces me pone una sonrisa colmilluda de vez en cuando al recordar los divertidos momentos que pasábamos en el Arcade del Reino Koopa luego de librar nuestras batallas en el Front Door.

En resumen, todo este tiempo tuve frente a mi en Mario al chico más importante, el héroe, el valiente, el que también tiene su lado pendejo tanto como yo, el que junto a mi arriesgó su vida, sin ningún temor por un puñado de felicidad.

*Ligera sonrisa* Ahora más que nunca debo estar motivada y manteneme fuerte en esta situación, además digamos que tambien estar agradecida por todo el cambio que esa corona provocó en mi.
Gracias a ella he podido obtener casi que en el peor momento la felicidad que tanto quería, incluso mejor de lo que llegue a imaginar.

Me ha puesto a contemplar, tal vez esto de ser chica no es tan malo; todo lo contrario, me ha gustado muchísimo, a pesar de mis cambios emocionales por la regla y eso, debo decir que al menos me siento mejor conmigo misma y he podido divertirme más al lado de Mario y JR...

JR... Mi pequeña hija, mi adorada Bowsy, todo esta causa y lucha también es por ella, mi niña la que siempre me conforta en los momentos difíciles, que con su sonrisa me hace recuperar esa maldad y amor que siempre necesito conmigo...
Nunca se me pasó por la cabeza ese accidente que la dejo convertida igual que yo, pero me enorgullece que haya tomado el cambio con mucha madurez para su corta edad.