¡CÓRTESE EL PELO, GEI! © vk.

N I N E

Por increíble que pareciera, Jungkook estuvo hablando todo -toooodo- el fin de semana con Taehyung. Eran conversaciones estúpidas, cambiantes y, aunque le costara admitirlo, también graciosas y entretenidas.

Las horas se pasaban considerablemente rápido.

Hablaban de todo un poco, desde caballos hasta hormigas y eso por poner un ejemplo de trivialidad. Asimismo, se mandaban fotos de lo que hacían o de sí mismos haciendo cosas, siendo Taehyung el más constante en esto. También debía admitir que tendía a molestarse cuando la respuesta del mayor tardaba en llegar y que lo único que hacía tras mandar un mensaje era esperar con ansias la contestación.

Tal vez fue por eso que desvió su mirada hacia la ventana del salón en cuanto lo vio entrar.

—¡Buenas días, mi gente! —Exclamó, como si fuera algún famoso o algo por ese estilo. Los presentes gritaron. —Y buenos días a ti, nena.

—¿Ya vas a empezar? —Rodó los ojos, tratando de distraerse al hacer mamarrachos en las hojas traseras de su cuadernillo.

—Te creció más el cabello. —Comentó, organizando sus cosas en su pupitre. —Córtese el pelo, gei. —Susurró cerca del oído ajeno, haciendo que Jungkook se revolcara.

Simplemente pudo reír ante tal reacción.

—¡Yah!

—¡Yih!

—¡No me imites!

—¡Ni mi imitis!

—¡No pienso dirigirte la palabra a partir de ahora!

—¡Ni piinsi dirigiti li pilibri i pirtit di ihiri! —Entre carcajadas altas, tomó asiento. —Y yo que pensaba invitarte a un helado a modo de disculpa y para presentarte a Yeontan.

La expresión en Jungkook fue cómica. Afortunadamente, Taehyung no lo estaba viendo pues originalmente se sentaba detrás.

¿Kim Taehyung invitándolo a un helado? ¿El mismo Kim Taehyung que lo molestaba y prácticamente le ordenaba todos los malditos días que cortara su hermosa cabellera? ¿Ese Kim Taehyung quería invitarlo a un helado?

—¿No dices nada? —Retomó, ansiando una afirmativa. —¿No te gusta el helado?

—¿Por qué habría de salir contigo?

—Porque soy genial —se mofó. —, y sé que en el fondo me amas.

—¡Ya empezaste con tu egocentrismo!

—No es egocentrismo, Rapunzel. Es la verdad.

—¿Volviste con eso de Rapunzel?

—¿Vas a salir conmigo sí o no?

—Sólo porque quiero conocer a Yeontan.

Y tal vez por otro motivo más.