Kimetsu No Yaiba Moderno T2

Sombras

Hacía un día que se habían enterado que eran criminales. Los no nombrados eran los que hacían las compras y cosas por el estilo, mientras los otros se encargaban de los demonios que sentían cerca.

— Pueden ir a la casa de mis hermanas — Recomendaba Kanao — El apartamento es grande, y desde que apoyen monetariamente mis hermanas no tendrán problemas en recibirlas —

Senjuro se queda en silencio y luego mira a su padre — ¿Qué dices? Lo mejor podría ser eso, ya que ellas no son directamente buscadas... —

El abuelo asintió — Será lo mejor —

Aunque al inicio Kie y la abuela de los chicos se opusieron, se vieron obligados a aceptar si las chicas daban una respuesta afirmativa.

— Ustedes también deberían ir a sus casas — Habló Tanjiro mientras miraba a sus compañeros — A los que buscan solo somos nosotros, abuelo tú igual, posiblemente no te nombraron porque creen que solo eres un instructor, ya que así fue como te presentamos —

El abuelo suspiró — Confiaré en tus palabras, Tanjiro — Le sonrió — ¿Y ustedes qué harán? —

— Sí ¿Y ustedes? — Agregó también Zenitsu

— ¿Qué harán? — Ahora era Genya

— Tanjiro... — Kanao miraba preocupada al pelirrojo

Tanjiro solo suspiró — Seguiremos siendo cazadores, hasta que nos dejen de perseguir o hasta que podamos erradicar a los demonios de Japón —

Luego de darse cuenta de la ruptura de mando que hizo, mira asustado a su padre, que solo le sonríe.

— Buena decisión — Miró a los demás — Entiendo que Inosuke quiera matar demonios, que Aoi quiera estar con Inosuke, que Genya quiera apoyar a sus amigos, que Zenitsu quiera estar con Nezuko y Kanao con Tanjiro, pero por ahora por su bien vuelvan a sus hogares —

Ellos agacharon la cabeza, todos menos Inosuke y Aoi.

— Yo quiero seguir haciéndolo — Inosuke hablaba con la voz un poco baja, se ponía notar la desesperación en esta — En mi casa no sirvo para nada, en el instituto no sirvo para nada, pero aquí siento que sirvo para algo —

Aoi miraba con ojos suplicantes a Senjuro, luego a Tanjiro — Por favor — Una reverencia fue hecha por esta

Senjuro sonrió al ver a la pareja, aunque normalmente peleaban... tal parece que ella si se preocupaba por el bien de él.

— Inosuke y Aoi, esta bien, si quieren seguir con nosotros... — Fue interrumpido por Inosuke

— ¿Aoi? — Mira a la chica que sonrie, al darse cuenta que él la ve deja le sonríe — No, ella no tiene porqué verse involucrada en esto —

Aoi chasqueó su lengua y tomó con su mano derecha un mechón del cabello de Inosuke — Ya cállate, yo veré que hacer —

Antes de que empezaran una pelea de pareja, Tanjiro fue el que interrumpió — Entonces simplemente tenemos que hacer que ustedes nunca se separen — Sonrió — Entiendo la preocupación de Inosuke, pero el deseo de Aoi tampoco es inferior a esta —

Inosuke solo soltó un "Tsk" mientras asentía — Entonces tú verás —

Aoi sonrió, antes de pensar en decía alguna cosa, el padre de los Kamado habló — Entonces así serán las cosas, Kanao, Genya e Inosuke, vuelvan a sus hogares, Padre y compañía hablen con las hermanas de Kanao, váyanse ahora —

Antes de que pudiesen preguntar la razón del apuro, Tanjiro se para frente a todo el grupo.

— Váyanse ahora o será muy tarde luego — Desenvaina su katana, luego Nezuko lo sigue.

Sin cuestionar más el grupo que tenía que irse se va, mientras los otros miran desafiantes hacia un edifico a unos 10 kilómetros de ellos.

Luego un sonido sordo sonó, Shigeru desenvaina y se para a una velocidad anormal frente a su padre, una imagen residual queda en el lugar donde antes estaba, luego de desenvainar y cortar lo que se supone era el aire, una bala de un Sniper partida en dos cae al suelo.

— Vámonos — Luego de que Shigeru lo dijese, todos corren a la máxima velocidad que pueden hacia el lado contrario hacia donde se habían ido los otros.

Cuando se pudieron reunir luego de unos segundos, Tanjiro miraba bastante sorprendido a Shigeru.

— Tu velocidad fue demasiado rápida — Con sus ojos abiertos se sinceró

Shigeru solo sonríe — Lo último que permitiré es que alguno de ustedes sea herido —

El padre de familia solo suspiró — Bueno, por ahora lo mejor será abandonar esta zona y empezar a hacer guardia cerca de los demás, quién sabe y los busquen por ser familiares — Todos asienten y empiezan a seguir al hombre que corrió tan pronto habló.

— Nos observan — Inosuke tomó la delantera y guió al grupo hacia otro lado.

Entran a la ciudad y se escurren entre callejones hasta encontrar al grupo que caminaba hacia la casa de las Kocho.

Nuevamente Shigeru se para a una velocidad anormal pero esta vez frente a Nezuko, parte el aire y otra bala de Sniper cae al suelo.

— Ese debe ser el deadeye japonés eh... — Muerde su labio algo estresado — Que fastidio —

— ¿Deadeye? — Pregunta Aoi

— Es un término usado para gente muy buena como francotirador, se dice que nunca fallan una bala — Comenta Nezuko — Pero existen 12 Deadeye que son muy conocidos, uno de ellos es japonés ¿Rokuro? No me acuerdo el nombre —

Inosuke suspiró — Mi padrastro trabajó con un Deadeye, era muy aburrido escucharlo alabar a ese tipo —

Hablaban mientras corrían, no podían dejarse ver mucho en un solo lugar o en cuestión de minutos la policía o hasta el ejército les llegaría.

— — —

— Técnica de demonio de sangre — El Deadeye japonés Rokuro hablaba — Bala de sangre — La bala que tenía a punto de ser disparada se volvió roja y sangre empezó a gotear de ella — Malditos cazadores, aún con balas mejorad- — Empieza a convulsionar, luego es empujado del edificio exponiéndose al sol de madrugada.

Unos ojos rojos miraban como la ceniza volaba en el aire y una sonrisa prepotente se burlaba de él.

— Tan débil — Seguido de esto se tira del edificio.