Inocencia [Tamaki Amajiki X Oc]

Ya no quiero verte

Narrador omnisciente:

Kaia: Tamaki! El nombrado se levantó de su cama algo asustado ante el ingreso impertinente de la peliblanco.

Tamaki: K-Kaia... Q-que haces aquí? El peliazul, algo dormitado froto sus ojos y fijó la vista en la intrusa quien emanaba un aura de ira y enojo, similar al amigo de Kirishima, Katsuki Bakugo.

Kaia: Quiero hablar! Y me importa una mierda si quieres dormir, vas a escucharme quieras o no! Kaia se acercó a Tamaki y la distancia de sus rostros era de unos escasos centímetros. Necesito que me escuches...

Tamaki: No. Sentenció serio el peliazul. No pienso oírte, y vete de mi habitación. Kaia paró en seco sus pasos y miró atenta a Amajiki, que por primera vez demostraba tanta seguridad, similar a su sueño exceptuando que esta vez no era para provocarla sino para echarla de su habitación.

Kaia: Pero Tamaki. No pudo pronunciar una palabra mas que el joven de orejas puntiagudas comenzó a interrumpirla, elevando su voz.

Tamaki: No! No quiero oírte, mejor ve a decirle las cosas a alguien que te crea... Como ese tal Shinso. La mente de la menor no terminaba de procesar lo que el mayor le decía, en otra situación hubiera reído ante sus celos absurdos, sin embargo Tamaki tenía razón de estar celoso ya que cuando lo conoció salía con ambos, usándolos y teniéndolos a su disposición cuando ella quisiera. Pero eso cambio y ella lo sabía, por primera vez se apenaba de actuar asi y es porque por mas que lo niegue se estaba enamorando de Tamaki, al punto de preocuparse por sus sentimientos y por si salía herido.

Kaia: Por favor Tamaki... Otra vez las lagrimas amenazaban por salir. Necesito... N-necesito que me escuches... Su voz comenzó a quebrarse y un gran nudo en su garganta no la dejaba hablar.

Y si pudiera hablar con claridad, realmente que le diría? Que lo uso durante este tiempo, que nunca demostró un genuino interes y cuando lo hizo su mejor reacción fue evitarlo e ignorarlo durante días? No podía. Por primera vez su orgullo y confianza se doblegó mosntrandola como realmente era: una niña pequeña caprichosa y lastimada que juega con las personas.

Tamaki se paró de su cama y como si fuera la primera vez que reconocía que el mayor sea mucho mas alto que ella lo observó avergonzada por no saber mas que decir; "Vete" dijo una vez mas Tamaki y la peliblanco lo hizo, quebrando en llanto en cuanto cruzó la puerta de la habitación del peliazul.

Amajiki repensó la situación en su mente y dudaba si actuar de esa forma era la correcta, gran parte de él quería correr a abrazar y contenerla, no podía creer que haya sido tan frío; sin embargo se repetía las acciones de la peliblanco, ella no hablo ni se excuso en cuanto nombró al pelimorado, delatandose sola.  Suspiró y se envolvió entre sus sabanas queriendo que ese horrible sentimiento y malestar se esfumara.

***

Kaia corrió de regreso a las residencias y necesitaba hablar con alguien, no podía parar de llorar y sus sollozos comenzaban a resonar en el silencio de la sala común; necesitaba calmarse y la mejor persona para conseguirlo era Eijiro. Se apresuró y al tomar el ascensor marcó el piso de Kirishima, bajó del ascensor y tocó la puerta del pelirrojo, como él no respondía o daba señales de estar despierto volvió a tocar desesperandose un poco y escuchar sus propios sollozos la alteraban aun mas; Necesitaba calmarse y al ver que el nombrado no respondía se sentó dando la espalda a la puerta, golpeando la puerta con su cabeza mientras sujetaba sus piernas y apretaba sus labios así podía callarse un poco, realmente se sentía destruida.