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Tumbado en la cama, Harry oía respirar a ____, que le había dado la espalda desde el momento en que se acostaron. Desde que habían vuelto de la playa, ella apenas le había dirigido la palabra, y no podía culparla, ya que se había portado como un estúpido al pensar únicamente en sí mismo y en lo que deseaba.

Llevaba semanas utilizándola desvergonzadamente y había esperado que aceptara sin discutir su proposición matrimonial, sin considerar lo que significaba para ella.

Se había dado cuenta de que lo que sentía por ____ iba mucho más allá del mero deseo de vengarse, era mucho más profundo de lo que estaba dispuesto a reconocer. Y se había percatado cuando ella lo acusó de que su proposición formaba parte de su venganza. En ese momento cayó en la cuenta de que no había pensado en Charles Wilson al encontrar la prueba de embarazo, sino solo en ____ y en el bebé.

Todo lo que le importaba en la vida estaba relacionado con ella, con la mujer que lo había rechazado sin contemplaciones en la playa.

A pesar de que él no aceptaba una negativa por respuesta, en esa ocasión tendría que hacerlo. Había complicado las cosas entre los dos de tal modo que no veía una salida.

A pesar de que ella siguiera con él y lo hiciera mientras pudiera amenazarla con el DVD, ¿qué demostraba eso? Nada, salvo que, de poder elegir, ella no estaría con él; una verdad que le resultaba extremadamente dolorosa.

Sabía que la amaba y que no se imaginaba la vida sin ella. Harry no quería casarse solo para criar a un hijo, que, por otro lado, había sido fruto de su imaginación, sino para quererla y pasar el resto de la vida con ella. Y deseaba que ella lo correspondiera.

Pero no sabía qué hacer, a pesar de lo bien que se le daba resolver problemas. Se sentía impotente.

¿Cómo convencerla de que sus intenciones eran sinceras? Lo había intentado en la playa, pero de forma equivocada, pues le había ordenado lo que debía hacer en vez de preguntarle qué le parecía.

Apartó la ropa de cama, se levantó y salió de la habitación. La luz de la luna iluminaba la casa, fría y oscura, como el futuro que lo esperaba sin Nicole a su lado. Tenía que encontrar una solución: su felicidad dependía de ello.
   
   
Seguían comportándose educadamente el uno con el otro, pensó ____ mientras examinaba unos informes. Se mascaba la tensión entre ambos.

Harry le había dicho que fuera en su coche ese día porque él tendría que quedarse hasta tarde con unos clientes, de lo cual ella se alegró, porque estarían separados durante un tiempo. Se marchó aliviada del despacho.

Apenas entró por la puerta del piso, el teléfono comenzó a sonar.

Se apresuró a responder la llamada.

–Dígame.

–____, cariño, esperaba encontrarte en casa. ¿Qué tal el fin de semana? –preguntó su madre.

–Bien, fuimos a la casa de la playa.

–¿Has pensado en lo que te dije de los Styles? No me parece buena idea que sigas viviendo con ese hombre.

–Soy una persona adulta, Cynthia, y hace mucho que decido por mí misma.

–Ya lo sé, pero déjame aconsejarte en esta ocasión porque sé mejor que tú de lo que estoy hablando.

____ tuvo que reprimir el deseo de colgar para que Cynthia dejara de meterse en su vida.

–¿Querías decirme algo más?

–Pues sí.

A ____ le pareció que la voz de su madre se había alterado.

–Las cosas no están yendo aquí como pensaba y he decidido volver a Adelaida. Me encantaría que vinieras conmigo. Me marcho mañana por la mañana. Te dejaré un billete en el mostrador de facturación.

Aventura ProhibidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora