Olivia cree que toda su vida está perdida ante la separación de sus padres y que nada puede ser peor que ver como su familia se cae a pedazos. La ley de Murphy toma protagonismo en la vida de la adolescente cuando sus extraños profesores se aprovech...
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Llegue al parque y me senté a recuperar el aliento, tenia tanto por procesar. ¿En que momento mi vida se volvió una pesadilla? Hasta hace unas semanas atrás todo era tan perfecto y ahora parecía una broma, no me sentía segura en ningún lado.
Viví en una mentira durante dieciséis años, todos a mi alrededor tenían máscaras que ocultaban la realidad. Sumando la horrible situación que tengo que afrontar a causa de mis profesores. Siento que cuando menos me lo espere voy a explotar, esto es mucha presión para una simple adolescente.
Respire profundo algunas veces para lograr calmarme y poder pensar con claridad, debía ser inteligente antes de actuar. Estaba claro que nadie me creía respecto a mis profesores y no era una opción viable dejar la escuela, por lo tanto lo única y simple opción era evitarlos la mayor parte del tiempo. En cuanto a mis padres, tomé la decisión de pasar algunos días en casa de mi tía hasta que la tormenta cese.
El tiempo parecía no avanzar, intentaba matarlo dibujando mis sentimientos en un cuaderno, me ayudaba a descargar mi tristeza. Trazaba líneas grises sobre la ciudad lluviosa, algunos rayos en el cielo oscuro y finalmente una persona que se destacaba entre la multitud.
Estaba a punto de terminar mi dibujo pero fui interrumpida - Olivia ¿Que haces aquí? - El rostro enojado del profesor Harry ocasionó que el lápiz se escapara de mis dedos.
El shock se apoderó de mi, miles de pensamientos negativos invadieron mi cabeza - ¿Estas sola? - Mis palabras no salían de mi garganta, el miedo las había capturado y solo me podía limitar a ver como Harry guardaba mis útiles escolares con prisa.
- ¿Tus padres saben que estas aquí? - Continuo hablando y guardando los objetos derramados sobre la banca, sin recibir una respuesta de mi parte.
- Ven te llevare a la escuela - Colgó la mochila sobre su hombro y tomo mi mano temblorosa para llevarme a su carro.
Reaccioné al instante que intento meterme dentro - S~sueltame...me quedaré aquí - Harry volvió a tomar mi mano ejerciendo mayor presión.
- Cariño hace frío, te vas a enfermar si te quedas aquí. ¿Que te parece si te llevo a la escuela y no ingresas a tus clases? no te pondremos insistencia - Negué frenéticamente, debía evitar a mis profesores, no pasar tiempo con ellos.
- Entonces llamare a tus padres para que vengan a buscarte - De su bolsillo saco un teléfono y marco el número de mi padre, sin embargo logré detenerlo antes de que presionará llamar.
- ¡No! Iré contigo pero no llames a mis padres - En este momento si debía elegir a quien ver, definitivamente no serían mis padres, no hasta asimilar lo sucedido.
Sentí la felicidad de Harry cuando ingrese a su carro cargando el miedo sobre mi cuerpo - Ponte el cinturón de seguridad - Ordeno mirando desde el espejo retrovisor.
El transcurso fue incomodamente breve. Estaba experimentando una ansiedad inimaginable sin embargo sabía ocultarla no me mostraría vulnerable frente a mis profesores - Vamos a ingresar por la puerta lateral para evitar a los estudiantes - Al salir del carro lo seguí en silencio por el pasadizo que conectaba directamente con el corredor de profesores, al final se ubicaba la oficina del director.
La puerta estaba abierta esperando la llegada de ambos, una extraña sensación recorrió todo mi cuerpo al ver a mis profesores - Buenos días Olivia, llegas muy tarde - Espeto el profesor Ashton dejando ver su enojo.
Peter, quien se encontraba sentados sobre el sofá, soltó un suspiro pesado antes de hablar - ¿Sabes lo peligroso que es para una niña estar sola en un parque? Es decir, ¿No ves las noticias?...¡Oh que tonto! claro que no, eres una niña - Se incorporo para acercarse a mi peligrosamente, me sentía como un ratoncito acorralado por unos gatos hambrientos.
- Yo no... - Intente responder pero fui opacada por la demandante voz de Ashton.
- Por eso debemos explicarle Peter, para que esto no vuelva a suceder - Tomo una pausa para colocarse a mi altura obligándome a bajar la mirada.
Continuo su estúpido discurso utilizando palabras infantiles para humillarme aún más - Escucha pequeña, si tu sales solita sin un adulto responsable podrías perderte o alguna persona mala podría llevarte lejos de... ── Intercepte sin dejar que concluyera la frase.
- No soy estúpida, y ustedes no son nadie para decirme que... - Nuevamente fui interrumpida, no les importaba mi opinión.
- Déjanos termina cariño, cuando tus mayores hablan no debes interrumpir...¿En que estaba? ¡Oh si! en estos casos deberíamos castigarte pero voy a tener en cuenta que tal vez no fue tu intención y que todo es muy nuevo para ti ── El terror me recorrió las venas de solo pensar en como serían sus castigos.
- No hice nada malo para que me castiguen - Pronuncie entre un leve balbuceo conteniendo mis lagrimas.
- ¿Aun no comprendes Olivia? Rompiste muchas de las reglas que te hemos impuesto, si necesitas que te las enumere solo dímelo - Podía notar la escasa paciencia del profesor Peter con solo mirar sus ojos.
- Quiero irme a casa - Amenace con llorar, me sentía presionada ante mis tres profesores los cuales no paraban de tratarme como una niña que hacía berrinches.
Logre suavizar el corazón de Harry quien decidió que el castigo sería leve - Solo serán diez minutos en la esquina para que recapacites sobre tus acciones y luego las disculpas correspondientes - Sin embargo mi lado orgulloso no permitiría una humillación como esa.
El profesor Harry tomó mi mano con el objetivo de llevarme hacia la esquina de la habitación, en el proceso se generó un forcejeo - ¡No me toques! - Un fuerte azote basto para que mi valentía se esfumara.
- Mirando a la pared y en silencio, de lo contrario agregaremos minutos - Sin fuerzas para luchar termine cediendo, descanse mi cabeza sobre la fría pared sin poder silenciar mis horribles pensamientos.
