Reencarne en Sakura Haruno

Capitulo 1

Vamos al inicio de todo.

-Salia de mi casa en dirección a la escuela a buscar unos cuadernillos con tarea y a pagar la cuota, datos irrelevantes.

Ahora camino hasta el Instituto pero antes cruzo la calle para entrar a una tienda y comprar algo para beber.Entré a la tienda, tomé una botella de jugo y mientras sacaba el dinero un ruido me interrumpió.

-Manos arriba!y denme todo!-Gritó el hombre, parecía que tenia unos veinte años o más por el tono de su voz y su contextura corporal. Llevaba una gorra roja que tapaba parte de su rostro,una capucha que sujetaba la gorra para que no se caiga y su cara estaba tapada por un barbijo.

-Que suerte la mía...- Pensé. El ladrón apuntaba a la mujer a cargo del local, la cuál sin disimular nada tocó el botón antipánico.

Todo se desvirtuó, el ladrón se volvió loco, apuntaba su arma de un lado a otro, y le gritaba a la mujer una cantidad de palabras.

Yo no sabía que hacer, tenía un arma ¿Qué iba a hacer?

De repente de escucha un disparo que me saca de mis pensamientos, la mujer pegó un grito mientras forcejeaba con el hombre, yo mientras tanto seguía sin hacer nada, estaba en shock.

Sentí un miedo recorrer mi cuerpo cuando la punta del arma negra me estaba señalando.

El hombre comenzó a gritarme que le diera todo, y no sé que más, le dí lo que tenía, el dinero de la cuota y todo eso, pero siguió pidiendome más mientras me empujaba el hombro con el arma.

-¡No tengo nada, ya te dí todo lo que tenía!

-Si no tienes nada no me sirves-Dijo el hombre y elevó su arma hacía mi rostro, no sé como reaccioné y corrí hacía atrás en dirección a la salida del local.

-Aahg-Gruñi del dolor,era como si miles de agujas se te incrustaran en una parte del cuerpo,el hombre al parecer es la primera vez que disparó un arma ya que su cuerpo estaba tenso y se notaba ya que el arma temblaba levemente,bien que para disparar no tenía miedo,me intenté poner de pie por inercia pero otro disparo sacudió mi cuerpo. Mi pecho dolía, mi vista se nubló y  pude ver como el hombre se hacía cada vez más pequeño a la distancia.

Un dolor de cabeza muy potente fue lo último que sentí antes de que mis pensamientos desaparecieran completamente y todo se convierta en un negro profundo.