HALE'S AL CUADRADO

CAPÍTULO UNO

¡Amores! #HALESALCUADRADO llegó a Wattpad ❤

Me encanta esta historia, es algo nuevo y tengo la esperanza de que a ustedes también les guste❤

Todavía no termina TS.TM.TT  pero no me pude contener más ❤

Estaré leyendo sus comentarios ❤

Con amor, Beth! ❤

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¿Cinco semanas aproximadamente? ¿Tamaño correcto? ¿Latidos fuertes? ¿Qué diablos le pasaba a Deaton?

— ¿Qué dijiste? — preguntó incrédulo el menor de los Hale.

— Sé que me oíste, Derek. Repetirlo no cambiará nada; las pruebas no mienten — respondió Deaton con una paz que solo lograba enojar más al lobo.

— ¡Repite las pruebas entonces! — exigió.

— No, sé que no hay errores. Solo debes aceptarlo — se negó el druida.

— ¡Pero soy un hombre! — gritó Derek, perdiendo completamente el control.

— Un hombre lobo nacido que se acostó con una chispa natural con un poder descomunal... como el de Stiles, por lo que puedo imaginar — Deaton escuchó el gruñido del lobo y supo que solo lo estaba enojando más mientras limpiaba todos los instrumentos que había utilizado.

— Fue solo una vez — murmuró Derek, resignado, unos minutos después.

— Vamos, Derek, esa no es una excusa. Creí que Peter te había explicado todo esto cuando eras un adolescente, ya que no quisiste escucharlo de tu madre — se burló el veterinario.

— Lo hizo, pero fue hace mucho tiempo y la verdad es que lo había olvidado por completo — admitió totalmente mortificado.

— Bueno, entonces no tengo que explicarte cómo fue que terminaste en este estado.

— ¿Qué voy a hacer? — la voz de Derek fue baja, como si la pregunta fuera solo para sí mismo.

— Creo que deberías ir y hablar con Stiles. Lo hecho, hecho está, Derek, pero no por eso deberías tomarlo como algo malo. Un nuevo Hale está en camino y creo que ese es un motivo increíble para festejar — Deaton sabía que no era la persona favorita del beta, pero no pudo evitar darle el consejo al recordar al niño que solía acompañar a su madre a cada una de sus reuniones y que quedaba hipnotizado con sus libros.

— Un nuevo Hale — Los ojos de Derek se ensombrecieron con una mezcla de miedo y asombro cuando las palabras del veterinario se hundieron en su mente. Su corazón latía con fuerza en su pecho, y por un momento, se sintió abrumado por la inminente responsabilidad de ser padre.

— Deberías llamar a Cora y hablar con Peter también. El nuevo integrante merece estar rodeado de los suyos y ellos merecen disfrutar de todo lo que está por venir — dijo con una pequeña sonrisa.

— No se lo puedo decir a Stiles — el druida frunció el ceño al escucharlo. Él conocía al emisario de la manada McCall, él lo había entrenado, y aunque Derek dijo que solo fue cosa de una vez, él había sido testigo de cada una de las miradas que el chico le había dado al beta desde que era un adolescente.

— ¿Crees que él te daría la espalda?

— No, pero acaba de conseguir un ascenso en el FBI, está allá desde la semana pasada y él tiene solo veinticuatro años, Deaton. Nunca lo escuché hablar sobre un futuro donde él fuese padre, siempre hablaba sobre cómo se convertiría en el mejor agente del país. Yo tengo casi treinta años, yo no puedo acabar con sus planes de esa forma porque Stiles es capaz de dejarlo todo atrás para poder estar aquí conmigo — explicó el lobo con tristeza.