"Nos vamos a los Yunaites"
Marico, quién se iba a imaginar que tres limpias que se encaramaban de las matas de pumalaca y mango de la vieja Gladys, iban a parar en lo iuneites. Loco, nos sentíamos más arrechas que sugar baby yendo a la colonia tovar...
—Me encantas, Angélica —confesó Tom antes de besarme
—Y tú a mí, Tom —dije sin separar mi rostro lo suficiente como para interrumpir nuestro beso
El beso se sentía tan real, su lengua humeda en mis labios... Humeda?
Y entonces, caí en la vaina...
—DESGRACIAO' SPIKE, DEJA SOÑAR AUNQUE SEA —le grité al pequeño pomerania, y er diablo, digo el perro, comenzó a gruñirme
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—Mentira, mi amor. Tú edes tan dindo, veda' que shi, shi mi amor —comencé a hablar como la propia mongólica y el perro bipolar comenzó a jadear en señal de felicidad, lo bajé de la cama y comencé a buscar a Andrea en el cuarto, pero de esa chama, ni sus luces.
Anoche luego haber festejado la llegada del combo completo a los iuneites, nos enteramos el que el papá de Ale había comprado la casa de al lado, porque no es por nada, pero ese señor estaba bañao' en cobre oyó.
Más pendeja mi mamá que se enamoró del pelabolas de Felipe
—Ven, mi amor. Vamos a buscar a la loca —le dije a Spike para que me siguiera, inteligente mi sobrino, porque me siguió
Bajé las escaleras y vi a la familia cantarina sentada en el gran sofá viendo Nathalia del Mar.
Hice un pequeño carraspeo para que me pararan bolas
—Al fin saliste de la cuna, mija. Te dejé una arepa en budare, sirvete y rellenala tú —respondió mi mamá sin pararme ni media bola
Andrea se paró para acompañarme a la cocina como de costumbre
—Y entonces, ¿Qué hacemos hoy? —preguntó sacando 2 vasos y el jugo
—Sería fino ir al CC, turistear y toda la pinga, no sé, qué opinas tú? —respondí mientras servía el jugo y le daba el vaso—. Además que tengo que averiguar si o sí dónde va a ser la premiere, porque yo tengo un objetivo mana
—Deja le digo a Sandra para que nos acompañe, porque nos vamos a perder como dos webonas—respondió—, me voy a bañar en el pipi-baño-risnais, Andrea se des, pi, deee
«—Si es marisca esta muchacha»
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—Me llevo a las muchachas—informó la mayor, sin embargo nadie le paró pelota
Kiarrecho, esa gente todavía instalados viendo la novela.
— Carajitas —llamó papi desde el mueble
El pure se paró disimuladamente y nos dio una tarjeta negra, y luego detallé bien, ERA UNA DE CREDITO SIN LIMITES, DIOS MIOOO. Pero noo, tampoco las interesadas. Pero si esa es su voluntad, quien somos nosotras para desobedecer
