¿Puedo quedarme a tu lado?

¿Te he superado?

Ha pasado demasiado tiempo desde que nos conocimos, ¿verdad?, al principio existió algo que nos repelía el uno al otro (bueno...eso fue determinado por mi cuenta). Y... sólo fuiste el único en determinar que eso no podía mantenerte alejado y entrometerte en lo que no debías. Pero, gracias a ti entendí la gran diferencia entre mi padre y yo. Me di cuenta de que entre más rechazaba la mitad de mí que heredé de mi padre, me estaba convirtiendo en él.

Muchas gracias, por lograr que me aceptará a mí mismo. Te admiro demasiado... bueno... es lo primero que pasó. No... bueno...

Realmente al principio te odié porque, pensé -cómo un don nadie incapaz de controlar de controlar su propio poder logró pasar el examen de ingreso-, también pensé que eras una persona que sólo alardeaba... pero aquel día en el que luchamos, escuché la conversación que tuviste con mi padre, fue sorprendente cómo pudiste enfrentarlo frente a frente.

Otra cosa más. Gracias a ti logré acostumbrarme a nuestro salón y darme la oportunidad de conocerlos.

Poco a poco comencé a sentirme más curioso por ti. Deseaba ser más cercano a ti. Eres una persona tan brillante, adoro ese lado otaku que siempre mostraste hacia los demás. Yo también fui fan de ese hombre, pero debido al contexto familiar durante mi infancia tenía que reversarlo solo para mí.

Quise ser más cercano, pero realmente no quería incomodarte, por ese motivo también mantenía mi distancia. Pensé por mucho tiempo que te admiraba, no me di cuenta (o solo no quería darme cuenta) de cuándo cambio ese pensamiento hasta el día que nos encontrábamos todos reunidos días antes de nuestra graduación, las chicas preguntaron insistentemente a todos con qué tipo de persona deseamos pasar el resto de nuestras vidas, nunca respondí aquella pregunta en voz alta, pero fuiste quien apareció en mis pensamientos. Veía tu hermosa mirada, tu hermosa sonrisa, tus... hermosos labios... Tal vez si no fuese alguien tan reservado te habría atacado... No, estoy seguro de que no habría sido capaz de hacerlo por temor a incomodarte y tomarás distancia. En cambio, tú sí contestaste esa pregunta frente a todos que no te importaba la apariencia de esa persona, ni a qué se dedicara o quién fuese estarías bien con ella y tu mayor prioridad sería protegerla. -Yo también quiero proteger esa hermosa sonrisa- dije para mí, pero ¿alguien como yo será capaz de hacerlo? Si en ese momento me hubiese confesado ¿habrías aceptado mi amor? ¿habrías aceptado a pesar de que ambos somos hombres, a pesar de que dijiste que no importaba quién fuera solo tenía que amarte?, me daba miedo pensar que llegarás a considerarme como alguien malditamente loco o enfermo. 

Pienso que amar a alguien nunca será tan fácil como uno lo dice. 

Al graduarnos comenzaste a trabajar en la agencia que pertenecía a Night Eye y en el cual se encontraba Mirio uno de nuestros mayores y una de las personas que tanto admiras. Yo decidí seguir trabajando con mi padre, actualmente nos encontramos en buenos términos, ¿no crees que es algo bueno?

Nuestros nuevos trabajos nos distanciaron más rápido de lo que pensábamos, cada uno tomo su propio camino. Perdí completamente tu rastro, tú solo desapareciste aproximadamente un año después. 

Esperé tu regreso... nunca llegó el momento. Fue entonces que decidí dejar ese sueño que produje por muchos años. Sí, decidí abandonar lo que nunca podría ser.