What Is The Love? ~Harry Hook y tú~ >Descendientes 3<

|XIV|

~CHAPTER FOURTEEN~

    Traté de sonreír sin dejar de verlo. Lo cierto era que jamás había visto llorar a Harry y quizá nunca lo vería, pero en este momento parecía estar al borde de hacerlo. Su mandíbula estaba tensa, y sus manos apretadas en puños tan fuertes que se estaban poniendo blancas.

    -Iré por ese maldito al infierno y lo mataré.

    -No harás nada de eso, -sonreí tomándolo de las manos-, lo vas a olvidar y tendrás una vida.

    -Lo que me pides es ridículo e imposible, ¿lo sabes cierto?

    -Tú eres ridículo. -Traté de bromear, cosa que no salió muy bien porque este día estaba siendo un infierno-. Pero te amo.

    -Eso es todo lo que necesitaba escuchar. -Me besó, ambos sabíamos que queríamos que esto jamás terminará pero el dolor de la magia negra en mi interior que me consumía poco a poco logró que terminará cayendo al piso arrodillada-. Tienes que irte.

    Escuché demasiada tristeza en su voz, se me partió el corazón. No sería necesario que Harry buscará a mi padre para matarlo, si él se hacía presente yo misma lo mataría justo ahora.

    -No. Prométeme que seguirás adelante sin mi. Debes tener una vida.

    -Por supuesto -dijo con clara ironía. Tomé su brazo con fuerza haciendo que me viera a los ojos-. Escucha, lo que te diré es humillante y vergonzoso para mi, pero es cierto así que presta mucha atención y trata de no pensar en Ben cuando lo escuches -aclaró la garganta, ¿qué es lo que podría costarle tanto decir?-. Tú eres mi vida. Sin ti no podría vivir. -Traté de sonreír pero las lágrimas se acumularon en mis ojos, a lo mucho creía que diría que me amaba pero no eso-. Perderte a ti es perder el sentido.

    -Seguirás adelante, te lo prometo.

    -¡No lo haré! -respondió casi gritando, veía el dolor en su mirada.

    -Vaya, -suspiré con pesadez y tristeza-, perdón, sé que cuando recuerdes esto me odiaras, pero debes saber que lo hice porque te amo.

    -No hablas de volver a la isla, ¿cierto? -Negué, y antes de que él pudiera reaccionar lo besé.

    Introduje un poco de magia negra en él. Hacer esto me quemaba por dentro pero era necesario. Alteré su memoria para que me olvidará, y así no arruinara su vida tratando de ayudarme. Para Harry ahora jamás habría existido, al menos que alguien le quitara la magia o yo misma lo hiciera, y eso solo sucedería si al fin era libre. No pude retener las lágrimas que salieron de mis ojos. Seguramente esto no era un "hasta luego" sino un "hasta nunca". A pesar de desear lo contrario me separé de él y me quité mi collar poniéndoselo a Harry, di media vuelta y me fui sintiendo como todo se me derrumbaba.

   Mi collar estaba hecho de una piedra especial totalmente negra, pero con la magia que yo desbordaba se veía de todos los colores que quisiera; la tenía para evitar que las sombras me atacaran, pero al llegar a La Isla la magia desaparecería y también las sombras, así que prefería que Harry lo conservara. Subí a la limusina y no quise voltear porque me arrepentiría de esto así que cerré la puerta inmediatamente. Conforme más nos acercabamos a La Isla mi dolor desaparecía y los arañazos de las sombras se hacían menos dolorosos.

    -¿Podrías dárselo al rey Ben? -pregunté extendiéndole una carta a la persona que manejaba, era hablando sobre la situación de Harry y pidiéndole que no lo sacarán de ese trance. Él asintió y la tomó- Gracias.

    Bajé de la limusina y esa se dio media vuelta y se fue. Aún recordaba el plan, todo era perfecto, y así fue como termine aquí...

        Hace algunas horas ese mismo día.

    No pude evitar reprimir una sonrisa cuando Harry volvió a entrelazar nuestros dedos y puso una de sus manos en mi cintura. Recargo su barbilla en mi hombro y un escalofrío me recorrió cuando su aliento chocó contra mi mejilla. Posiblemente me había sonrojado y pensar que eso había sucedido frente a mi "familia" hizo que seguramente me sonrojara aún más.

    -¿Quién es él? -preguntó Aleckei aparentemente molesto.

    -Soy Harry Hook, el novio de _________ -respondió con una amplia sonrisa y sorpresivamente me dió un beso en el cuello provocando mayor ira de Aleckei y más vergüenza de mi parte así que solo bajé el rostro-, nos conocemos hace largo tiempo.

    -Tranquilo, tampoco me agrada -añadió Hades provocando una pequeña risa de mi parte.

    -¿De qué hablas? ¿Qué no eramos amigos? -Dijo irónicamente haciendo que Hades rodara los ojos.

    -Bien, haré esto -puse mis manos al frente haciendo una hechizo para que pudieras ver a Aleny a pesar de que ella estaba en el Inframundo-. Hades, ¿tienes el resto?

    -Creo que todos estan aquí.

    -Bien, supongo que para esto y para que entiendan lo que sucederá debo empezar por nuestra historia: Nadie sabe quién es realmente nuestro padre.

    -Una vez que terminé aquí -interrumpió Aleny- escuché rumores de que era un dios desterrado que solo quería vengarse.

    -Y considerando que su poder llega desde el Inframundo hasta nosotros, no lo dudaria -añadió Aleckei.

    -Y nosotros... -dije sin saber muy bien como continuar, revelar como habíamos "nacido" era algo complicado- no somos precisamente humanos.

    Aleckei volteó a verme, algo me hizo pensar que aún no les había contado a nadie en el Olimpo cómo era, y de saberlo quizá no lo aceptarían. Suspiré tratando en seco buscando como seguir. Harry tomaba mi mano y la apretó con más fuerzas como mostrando su apoyo. Quizá no eras nada del otro mundo, pero decirles a todos los que conocía que yo no era precisamente normal no era muy fácil. Sacudí la cabeza alejando todos los sentimientos y seguí.

    -Nosotros...