Cita a ciegas 💘

Capítulo 5

Jungkook había llegado a su apartamento, se duchó, se puso ropa cómoda y se acostó en su cama para dormir, había sido un día muy activo y se sentía cansado ya que no acostumbraba a salir.

Mientras intentaba conciliar el sueño, escuchó un fuerte golpe que lo asustó y sin dudarlo salió de la cama para averiguar qué ocurría.
Al salir de la habitación, miró la perilla intentando girar pero no parecían conseguirlo. Había visto esta escena en otro momento y solo había alguien tan inútil que no consiguiera abrir la puerta.

—Yoongi —susurró.

Éste se acercó y abrió la puerta viendo al chico en el suelo cantando.

—Havana, ooh na-na, half of my heart is in Havana, ooh-na-na 🎶 —rió al no recordar más de la canción— ¡Te la sabes, Jungkook-ah! Canta conmigo.

—No, tú debes ir a dormir, ven conmigo —Lo ayudó a ponerse de pie poniendo su brazo en sus hombros para meterlo— sabes que a estas horas de la madrugada no puedes cantar tan alto.

—¿¡DE QUÉ HABLAS!?

—De eso hablo, por favor no grites, hay personas intentando dormir.

Jungkook dejó al chico en el sofá mientras éste parecía divertirse.

—¿Por qué bebiste tanto? Te traeré una aspirina —Fue a la cocina para que éste le contara.

—¡Hoseok y yo tuvimos sexo! —rió nuevamente divirtiéndose con la situación.

Jungkook le llevó la pastilla junto con un vaso de agua.

—¿Y te pusiste tan feliz que celebraste?

—No, tonto.

—¿Entonces?

—Es que... ¡Estoy acabado! —Se recostó— él nunca va a amarme como yo lo amo a él.

—¿Lo amas?

—¡Sí! —Decía fingiendo llorar mientras abrazaba el cojín— ¡No sabes cuánto deseo estar con él!

—Pero ya lo estás.

—¡Pero no de la forma que quiero!

—Oh vamos, Yoongi, tú eres igual que él.

—¿Se supone que me sienta mejor?

—No, es la realidad.

—Maldición —Se quejó agarrándose la cabeza— estoy harto, no quiero esto.

—Entonces termínalo antes que te siga afectando, no puedes beber solo porque esto se volvió en una relación de sexo casual.

—Pero si le digo que no quiero esto, ya no volveré a verlo.

—¿Y? No creo que sea lo mejor para ti, te estás lastimando, hyung.

—No, no... —Le puso el dedo índice en los labios— escúchame bien lo que te diré, Hobi jamás me lastimaría.

—No, tú escúchame a mí, Hoseok...

Yoongi cayó rendido en el sofá así que éste suspiró. No podía hacer mucho por él, le gustaba mucho ese chico pero se encontró con su peor pesadilla: alguien como él.

Por otro lado, Hoseok había llegado al apartamento mientras Jimin lo esperaba, al verlo entrar por aquella puerta, se puso de pie y se acercó oliendo el potente aroma a alcohol y cigarrillos.

—¿¡Estuviste fumando!? Hoseok te he dicho que...

—Shh —Le puso el dedo índice en sus labios— tu voz es irritante, me duele la cabeza así que no me regañes.