Capítulo 11

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El miedo a lo incierto es bastante común entre las personas, sean muggles o gente mágica. Es por esto que se han creado teorías de la evolución para explicar la aparición del hombre, o teorías de la existencia de seres superiores, dioses o seres mágicos que nos controlan desde la lejanía, para tener la certeza de que no estamos solos y debemos hacer el bien para que seamos cuidados mientras vivamos o bienvenidos al paraíso cuando fallecemos. En la situación de Callie, ella decidió a recitar en su mente distintas plegarias a cada Dios del que escuchó hablar, rogaba no encontrarse a una bestia rodeada de cuerpos teñidos de rojo. Temía terminar como uno de esos cuerpos ella también.

Cuando llegó al final del túnel empezó a seguir los murmullos cercanos. Estaban cerca, definitivamente habían pasado por el mismo túnel que ella acababa de atravesar. Se preguntó cómo podía ser que supieran de la casa escondida bajo el sauce esas personas. Tal vez habían visto a Callie y a Aaron entrar, no se había fijado si había alguien mirándolos.

-¿Aaron? ¿Sos vos?- preguntó una voz conocida, conocida pero inesperada.

Hubo un segundo de silencio interrumpido por la voz sorprendida y entrecortada de Aaron pidiendo que se fueran, que quería estar solo.

-¿Dónde está ella?- volvió a preguntar la voz- yo los vi entrar a los dos.

- Eh... ¿Hablas de Callie? Y no sé por qué les interesaría a ustedes saber eso, no son sus amigos- le respondió Aaron confundido. Se escuchaban las cadenas chocar unas con las otras.

Era enormemente tranquilizador saber que su amigo seguía en su forma humana, y no había rastro de sangre a su alrededor, lo que significaba que todavía estaba a tiempo de sacar de ese lugar a los intrusos.

Una vez en el marco de la puerta Callie pudo confirmar su idea, la persona que estaba hablándole a Aaron era Timm. No estaba solo, al lado suyo estaba Karina Perkins. La pregunta es; ¿Qué hacían los dos ahí, JUNTOS? Nunca supo que ellos dos fueran amigos, no es que ella supiera mucho de sus vidas privadas pero no los había visto siquiera en el mismo cuarto, mucho menos en el mismo grupo de amigos.

-¿Que no somos amigos? Puede ser que no sea muy obvio Aaron, pero Callie y yo somos algo más -Timm y Karina estaban de espaldas a Callie, parados en frente de Aaron que estaba sentado en el piso sin mucha movilidad por la cantidad de metal que lo envolvía. – somos almas gemelas, yo no se ¿Por qué crees que estamos nosotros acá? Estabas escabulléndote aquí con mí Callie a hacer quién sabe qué. No podía dejarte.

No lo podía creer, Callie no creyó que pudiera llegar a ese punto. Qué nivel de locura tenía que tener una persona para celar tanto a alguien como para espiarla y seguirla.

-¿No querías dejarme hacer qué?-Aaron se veía raro, estaba temblando y sus dientes le castañeaban al terminar las palabras -se levantó como pudo.

- ¡Quedarte con ella! Estaba esperando el momento de descubrirlos a los dos juntos, en algún lugar, solos. Es lo que hacen, como el otro día, yo estaba hablando con Callie perfectamente hasta que me tuve que ir porque llegabas vos, te vi acercarte a los invernaderos- dijo el chico rubio con la cara roja y arrugada.

Era de esperarse que Aaron no iba a quedarse callado, siempre defendió a Callie con manos y dientes, es un amigo muy leal y muy valioso. Callie salió de su ensimismamiento y se acercó a ellos, sabía que en el momento en que se muevan las pocas noves que quedaban en el cielo, su amigo se iba a transformar. Tenía que apurarse a sacar a Karina y a Timm antes de que eso pasara, para que no se enteren de en lo que se puede convertir o de lo que puede llegar a hacer su amigo.

-Los seguimos con Karina para confirmar la verdad, Callie está engañando a Oliver contigo. No la culpo, no necesitaría engañar a su novio si estuviera con alguien como yo. Yo estaría con ella todo el tiempo-expresó Timm con ojos soñadores, como si ya hubiera imaginado escenarios en su mente.

-¿Qué se supone que significa esto Timm, No ves que Aaron no se siente bien?-exclamó Call.

Los dos intrusos se dieron vuelta de inmediato y el chico continuaba con un aire de confusión en el rostro, pero había una luz en sus ojos que preocupaba a Callie, parecía fuera se sí. Karina se veía más aburrida que sorprendida, como si ella hubiera esperado algo más de acción que una confesión de los sentimientos y pensamientos de un chico con cara de loco. Pero cuando vio a Callie se iluminó y sus cejas volvieron a elevarse, como siempre hacían cuando la veía.

-Genial, ya está aquí. Esto se va a poner bueno -se alegró Karina.

-Perdón si herí tus sentimientos Timm pero lo que dije es verdad, quiero ser tu amiga, pero solo eso. No estas justificado a seguirme y a espiarme cuando estoy con mis amigos, eso es acoso y no me siento cómoda sabiendo que estas intentando sabotear mi relación con Oliver, cuando lo que estás diciendo es mentira.

Era el colmo, una vez que consiguió a una pareja con la que se siento totalmente a gusto, hay gente que le causa problemas. Todavía no sabía qué era lo que estaba haciendo Perkins ahí.

-¿Qué estás haciendo aquí vos de todas formas, te gusta Aaron?-Callie no sabía si lo había dicho para incomodarla porque sabía lo que Karina pensaba de los magos con padres muggles, por alguna razón a ella y a su grupo de amigas les disgustaban, lo que a ella le resultaba ridículo.

Karina negó rotundamente mientras los insultaba a ella y a Aaron. Era un poco gracioso, pero entonces Callie recordó lo que tenía que hacer, debía alejarlos de ahí lo más rápido posible. 

Slytherpuff, querer o amar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora