22-Amor no correspondido

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-Mi cerebro quería irse de ahí, quería irme, pero mí cuerpo no se movía.

-Sentí como mí corazón se rompía, pedazo por pedazo.

-Gilbert y Winifred se estaban besando. Si, besando.

-Creo que se escuchó mí llanto, que al ver esa escena salió por si solo.

-Ahí es cuando Gilbert se da cuenta de mí presencial y aparta a Winifred.

-Salí corriendo, no podía verlo a la cara.

-Corrí, pero como el es más rápido que yo, logró alcanzarme.

_Anne, en serio no es lo que piensas. -dijo Gilbert entre lágrimas.

_¿No es lo que pienso? Acabo de verlos muy a gusto besándose Gilbert. -dije sin mirarlo a la cara. 

_Anne, por favor, déjame explicártelo. -Quiso tomar mí brazo pero yo se lo arrebate bruscamente.

_¡NO QUIERO HABLAR CONTIGO! -dije levantado la voz.

_No me busques Gilbert, lo arruinaste. -dije eso para luego irme, trataba de demostrarme fuerte, para que él no me viera débil, pero no podía evitarlo, lo amaba.

-Fui a la tienda de Jaden.

_¿Jaden? ¿Estás despierto? -dije tratando de controlar mí respiración y que no se note tanto que estaba llorando.

-No sé cómo, pero Jaden sabía que estaba mal, así que de inmediato salió de la tienda y me dejó pasar.  Aún que nos hayamos conocido hace poco, sentía que nos conocíamos de toda la vida.

_Anne, ¿Que te pasa? ¿Alguien te hizo algo? -preguntó preocupado.

-No respondí nada, simplemente lo abrazé.

-Y vaya que me ayudó demasiado, me sentía tan segura con él.

-Sabia que él estaría ahí para mí cuando lo necesitara. Y yo también estaría ahí para él.

-Estuvimos un rato largo abrazados. Cuando nos separamos me regaló una sonrisa sincera y triste a la vez.

_¿Me vas a contar que pasó?

_E-s G-Gilbert. -Ni siquiera podía hablar, sentía un dolor profundo en mí pecho y tartamudeaba.

_¿Que te hizo Gilbert?

-Noté que su voz se hizo un poco más intensa en la pregunta, no quería ser tan directa, no solo se trataba de Gilbert, también de Winifred, su hermana.

_También se trata de -hice una pausa larga para luego seguir- También, de Winifred.

-Los ojos de Jaden se abrieron aún más.

_L-los encontré. -hice una pausa aún más larga-

_¿¡Los encontraste qué?! -Preguntó Jaden aún más nervioso.

_Besándose. -dije para luego bajar la cabeza. Y las lágrimas volvieron a salir.

-Jaden al escuchar eso, simplemente, me abrazó. Con más intensidad que el abrazo de recién. Me puse a llorar sobre su hombro.

-En serio, quería mostrarme fuerte, no quería que pareciera que era débil. Pero no podía evitarlo, algo en mí se quebró.

-No sé cuándo me quedé profundamente dormida.

(Narra Jaden)

-No podía ver a Anne llorando. Sentía unas ganas inmensas de ir y pegarle un buen merecido a Gilbert.

-Y Winifred, no es raro de ella. No saca el hecho de que me enfurece ya que lastimó a una de las personas que en tan poco tiempo se volvió muy importante para mí.

-Se quedó dormida estaba acostada en mis piernas y yo estaba sentado apoyando mí espalda con cojines detrás míos.

-Y más vale que a Gilbert no se le ocurra aparecer por acá, por qué juro que no reacciono a los acontecimientos que puedan pasar.

-Contemplé a Anne por un rato. Es verdaderamente hermosa. Y es la persona más noble, dulce y fuerte que he conocido.

-Sigue adelante y nunca se rinde después de todo lo que ha tenido que sufrir a lo largo de su vida. Anne es un ejemplo, de que con dedicación y esfuerzo se puede seguir andando.

-Cuando me desperté era muy temprano.

-Anne estaba profundamente dormida, entonces la acomodé en los cojines y la tapé con una cobija para que estuviera cómoda.

-Salí de la tienda en busca de Winifred. Yo no podía hacer algo respecto a Gilbert. Pero si podía hablar con mí hermana respecto a esto y sobre todo el daño que causó.

-No sé en qué tienda durmió anoche. Pero si se le ocurría aparecer en mí tienda la echaría enseguida.

-Cuando al fin la encontré estaba charlando con una chica.

-Me acerqué a ella y le pedí que habláramos, ella sabía lo que le esperaba, ya que cuando me vió se puso completamente nerviosa.

_Tu y yo, debemos hablar. -le dije serio.

-Winifred se disculpó con la mujer que estaba hablando y nos dirigimos hacía un costado.

_Espero que estés arrepentida. -le dije enojado.

_Lo estoy, pero ya es tarde. No sé puede hacer nada. -dijo en un tono dramático. Winifred era muy buena actriz, podía engañar a todo el mundo menos a mí. La conocía como la palma de mí mano.

_No lo puedo creer, tu planeaste todo.

_¿Que? ¿En serio hermanito? ¿Tu me crees capaz de esto? -dijo en tono sarcástico.

-Eso me hizo enfurecer aún más.

_No te imaginas todo el daño que le casaste a Anne. -dije cerrando los ojos para poder contener mí enojo.

-Ella solo, se rió. Si, se rió ¿Pueden creerlo?

-En serio esto se estaba saliendo de control.

_Estas loca. -dije levantado un poco la voz.

_Mira, Jaden. Tu tal vez puedes engañar a todos, pero a mí no.

_Tu estás haciendo todo esto porque estás loco por Anne. Te encanta y harías lo que fueras para que esté feliz. Pero ¿Sabes que es lo que te pone peor?

_Que su amor no es correspondido. Ella está loca por otro hombre, que te recuerdo, que es su esposo. -todo eso lo dijo con una mirada arrogante y desafiante a la vez.

-Esas palabras en serio me dolieron, era ni propia hermana la que hablaba así de mí.

-No reconocía a mí hermana. ¿Desde cuándo se volvió así? Tan egoísta y malvada.

_Ella armó todo el plan, y lo peor es que Gilbert no tiene la culpa. Ella lo besó, para que Anne pudiera verlo y así que todo se arruine.

-No sabía cómo irían las cosas, pero lo que si sabía es que no irían para nada bien.

Te Esperaré -Anne y Gilbert-✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora