× Historia YuuMika ×
Mamá, papá... No lo entiendo...
¿Por qué me odian?
¿Por qué dicen que ya no soy su hijo?
¿Por qué dicen que les doy asco?
Sigo siendo yo, su hijo, Mikaela
¿Por qué no pueden ser capaces de aceptarme tal & cómo soy?
Sólo es un t...
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Oye... Mamá...
No lo entiendo...
Qué se supone qué debería entender en primer lugar?
El qué por algo que te dijo alguien más ahora me negarás tu cariño?
Porqué tú & papá se comportan así?
Sé que soy diferente pero no es para tanto...
O sí lo es?
——Mikaela Geales ——se escuchó una voz detrás de mí, la reconocí al instante, el miedo invadió mi cuerpo, haciéndome temblar & tartamudear, la mujer detrás de mi empezó a suspirar con molestia, golpeando levemente la punta de su zapato en el suelo, demostrando su molestia & desesperación—— ¡MIKAELA GEALES! ——gritó, ahora sí estoy muerto.
——S-Sí? ——contesté tratando de ocultar mi nerviosismo, me giré un poco sobre la silla para verla, su rostro demostraba molestia, sí, estoy muerto.
——¿Qué crees que estás haciendo? —— cruzándose de brazos, frunció aún más el ceño, dudé en contestar, comenzaba a molestarse de nuevo, tierra trágame—— ¿& bien?
——Un dibujo ——solté de la nada, parecía más una pregunta que una contestación.
——¿Un dibujo de qué? ——demonios, se está molestando más, estoy muerto, más que muerto.
——Un arcoiris ——señalé el dibujo que estaba frente a mí en mi lugar, la mujer frunció mucho más el ceño—— es que le gustan mucho a mi mamá & yo la extra...
——Los arcoiris no son cosas de hombres, Mikaela ——interrumpió, sin decir nada más, se alejó de mí, hasta que la vi lejos pude respirar de nuevo, dando media vuelta en mi lugar continúe con mi dibujo.
Será que tiene razón...?
——Es él ——aquella voz me sacó de mis pensamientos—— Mikaela Geales ——abrí los ojos a más no poder, girando nuevamente, allí estaba, aquella mujer rubia señalandome, hablando con dos enfermeros que estaban detrás de ella.
Sentí demasiado miedo, tanto que ni siquiera escuchaba lo que decía, todo parecía ir de una manera muy lenta, después de un momento, la mujer se fue, pensé que todo iba a estar bien hasta que los hombres a los que ella había llamado se acercaron a mi, tomándome de los brazos tratando de levantarme, regresé a la realidad, ambos seguían intentando llevarme
——Oigan, ¿a dónde me llevan? ——pregunté resistiendome.
——Son órdenes de la señorita Aoi-san ——respondió un pelirrojo, estoy más que muerto.
——No, no quiero ——dije pero lograron levantarme de mi lugar—— no quiero ir, no hice nada malo ——grité, llamando la atención de las demás personas que estaban ahí, pero no me importó—— ¡Déjenme! ¡No quiero ir! ——sin mucho esfuerzo lograron sacarme del lugar, me llevaban a rastras mientras les suplicaba, no quiero, no de nuevo.
