Adultez

Parte 11

-Las chicas deben quedarse con el que rompa su himen. Eso es totalmente real.

Maka elevó sus ojos al cielo, Tsubaki tomaba su té y la miraba con cara de "no vayas a comentar nada". Entre el escandaloso divorcio de sus padres y la relación que ella y Soul sostenían, eran continuamente asediadas con preguntas incómodas, y Maka no estimaba oportuno compartir tales cosas con el resto de las chicas de Shibusen.

Pero siempre sucedía lo inevitable, una de las chicas preguntó a Maka que pensaba.

-Que estoy jodida. Me rompí el mío en una práctica de vuelo. –la cara de dolor y terror de cada chica se expresó junto a un Auch colectivo.

-¿Te dolió?

-pfff –Maka hizo un ruido sosteniendo su lengua afuera – no podía moverme. Estabas ahí, ¿Te acuerdas? –miró hacia Kim- Te dije que volvieran a casa. Soul tuvo que cargarme a enfermería.

Tsubaki la miró extrañada. Ella había escuchado otra historia.

-¿En serio? ¿Cómo le explicaste?

-Le dije a él que me había lastimado el tobillo, pero la enfermera tuvo que mirarme, aproveché de hacerlo salir pero igual se escuchó todo. Así que según esta genialidad de compañera que tenemos, debo estar con Soul para toda la vida porque no lográbamos ponernos de acuerdo en la forma de las alas.

-¿Se sentirá raro estar entre las piernas del técnico? –dijo otra niña, que era también un arma.

La conversación se desvió totalmente, y Maka terminó su bebida tranquila, volviendo a su estudio sin que nadie la moleste. Fue Ox quien había sido el recipiente de la versión de Soul de qué había pasado, pero como estaban en terreno junto a Kim, no era raro que ella escuchara. Le había pedido consejos a Soul y Black sobre como conducirse la primera vez, pensando en que fueran los dos a una cita a un Onsen o a algún hotel.

"-No, mira, no porque estén solos va a pasar, son cosas que van de apoco y a veces toma su tiempo, no sería bueno que tuvieran que pensar en el reloj. Con Tsubaki podemos estar horas...

"-Ya, no queremos saber de tus hazañas, aparte... la primera vez puede serles doloroso. A Maka la ruptura de su himen le causó dolor, porque le estaba... no sé cómo decirlo que no suene... con la boca yo ¿Entendido? Entonces los dedos y... pero aún así le dolió, y si hubiera sido conmigo dentro realmente no lo hubiera pasado bien del todo. Los dedos duelen menos, es todo lo que opino.

En las duchas, Tsubaki se aseguró que estuvieran ellas en un rincón para preguntarle a Maka sobre las distintas versiones. Kim vio el gesto y tomó oído.

-En realidad Soul me llevó a la enfermería, y tuve que explicarle que me había dañado de una forma que no quería darle muchas explicaciones. La enfermera me puso un lubricante con anestésico para ayudarme, y me dio un tubo. Ya tiempo después, cuando llegamos a tercera base- aquí se sonrojó –Soul hizo con los dedos... ya sabes... y terminó de romper. Eso también me dolió, y él se asustó de ver sangre. Eventualmente le pedí que lo intentara de nuevo y ya no volvió pasar.

-Maka... sabes que yo ni sangré. Al final creo que debo haberlo dañado volando también.

-O entrenando –Tsubaki cerró su ducha. Yo tampoco.

-Igual me dio risa poder contradecir... ajajaj. Exclamó cerrando su llave también.

-Y les diste la razón de que te quedarás con Soul para siempre.