14- Una canción

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Era real….lo que sentía era real y no me quedaban dudas.

Me debatía en el dilema de conservar mi amistad con Emilia o dejarme llevar y de una vez y abrirle mi corazón a Brandon.

AMISTAD O AMOR????

Ojalá y hubiese escogido mejor…pero cómo se escoge entre la amistad y el amor, cómo hago para no lastimar a nadie…

Eso era imposible, sabía que no iba a acabar bien y al final terminaría mal con el corazón partido y con mi peor pesadilla hecha realidad… quedarme sola.

Que paradójico verdad, amar tanto la soledad y tenerle tanto miedo.

Llegué ese día al colegio, era un manojo de nervios, el día anterior casi no había comido nada y hoy  no había desayunado solo traía un vaso de jugo en el estómago.

Esta situación me superaba, me venía grande y yo no sabía como actuar.

Me senté en una banca del patio a esperar por Emy como de costumbre.

Tenía miedo de ver a Pierce, Tasha tenía razón después de leer esa carta comencé a replanteármelo todo…pero luego mi conciencia hablaba más alto…

Y siendo claros era mejor si me apartaba, prefería tener que pasar de esa situación, no podía dejarle saber que ya me estaba poniendo demasiado emocional…

Para mi mala suerte ese día hacíamos no sé qué fregados, no sé por cual señor y todos nos reuníamos en el patio.

Emilia llego con sus juegos infantiles y para darme un susto me tomó del trasero, me llevé un gran susto debido a mis nervios.

Ella solo rió por lo divertido del momento.

- Que sepas que no me hizo ni puta gracia guapa.

- Pues a mí si.

- Bueno ya, para la próxima saluda como las personas normales bonita- su respuesta fue darme un empalagoso beso en las mejillas a lo que me dijo:

- Tía estás bien, estas más fría que un muerto y ahora que te veo, también estas pálida.

- Pero si  me siento bien…

La verdad me sentía un poco débil y estar rodeada de tantas personas tampoco ayudaba, pero decidí pasar por alto las advertencias de mi cuerpo.

Alguien se paro justo a mi lado, miré al suelo…esas botas, mire un poco más arriba…esa chamarra de cuero hasta que miré su cara…

Era él

Solo dijo *hola* mi corazón se disparó, abrí mis ojos como platos, suspiré y la debilidad se apoderó completamente de mí.

Comencé a verlo todo con destellos de pequeñas luces blancas…de repente todo se puso negro y caí al suelo, escuche en la lejanía una voz llamándome por mi nombre y no supe mas de mí.

Desperté en enfermería, aún me sentía un poco débil y mi cabeza dolía un montón.

La enfermera muy amable me preguntó que como me sentía, le respondí y me dijo que era normal que me sintiera así y que el dolor de cabeza se debía al golpe que me había dado al caer al suelo, me dio una pastilla y se fue a llenar unos papeles, pero antes me advirtió que me quedara quieta descansando.

Las visitas no tardaron en aparecer y la persona que menos quería inauguró la apertura.

Llegó y se sentó a mi lado, se inclinó hacia mí y comenzó a acariciar mi cabello.

- Vaya susto me has dado- su voz sonaba dulce y percibí cierta preocupación en sus palabras

- Jooodeeer ni aun así de jodida me dejas en paz

Ally Burke [En Proceso](18+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora