Lan Sizhui, Lan Jingyi y Jin Ling encontraron algo extraño en una cacería nocturna, cerca de las montañas de Gusu Lan se situaba una gran piedra brillante, los chicos por investigar se acercaron demasiado, haciendo que la misma los absorbiera.
Lo qu...
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Agarrense bien de sus asientos, esto va a estar intenso.
Los chicos ahora si se encontraban en problemas, y no solo ellos, sino que los abuelos tambien.
Mientras se encontraban fuera, Muelle de loto recibio una carta de parte de Jiang Cheng, la cual solicitaba la presencia inmediata de los chicos en Qinghe.
Pero como no estaban, no se enteraron sino hasta la mañana siguiente que regresaron.
-Mamá va a matarnos. - Jingyi era el mas preocupado en este asunto. Tenía a sus abuelos de su lado, pero sus dos padres podian llegar a ser muy terroríficos cuando se enojan.
-¿No llegaremos a tiempo si salimos ahora? - Jin Ling no tenia muchos problemas con el asunto, pero estaba preocupado por lo que pudieran necesitar.
-Supongo que llegarian al atardecer... - Fengmian lo pensó un poco. Pero seria algo arriesgado enviar a sus nietos ahi sin mas, ya que él y su señora no podrian acompañarlos.
Un discipulo que entró en la sala, obtuvo la completa atrncion de las personas. Este infomo que Yanli habia llegado.
A Jin Ling le brillaron los ojos y de inmediato dió media vuelta para comenzar a correr a la puerta principal, llevaba una semana sin ver a su madre, y claro, sin comer deliciosa sopa.
Cuando la vio extendio los brazos para abrazarla pero en ese momento sintió un dolor horrible en su brazo.
Paró en seco y se dobló por el dolor, se le nubló la vista, y lo ultimo que recordaba era a Yanli ahora corriendo hacia el, y en el fondo las voces de sus abuelos.
-¡Sizhui! -
-¡Jingyi! -
...
El plan que se tenia era infalible, estaba hecho por Meng Yao, supervisado por Nie Mingjue y aprovado por el resto.
Pero en caso de que algo saliera mal, Wei Wuxian tenia un az bajo la manga que no le habia contado a nadie. Esperaba no utilizarlo, para evitar tragedias, pero estaba ahi disponible.
Al entrar por las puertas de Ciudad sin noche, lo primero que notaron era que los guardias no abundaban en el lugar. Apenas habia unas decenas que eliminaron al instante.
Se adentraron un poco mas hasta llegar a una planice rodeada de piedras talladas. Wei Wuxian rodó los ojos pues recordaba esas estupidas escaleras al frente.
-¡Jiang Cheng! ¡Los niños! - recordó Wuxian en un brote de inspiracion a su hermano. Habian mandado la carta, pero no habian llegado y el Lider Nie habia dicho que no podian esperarlos más.
A Cheng se le revolvió el estomago. Era verdad. ¡Los niños!
-Wanyin, estaran bien, ahora concéntrate aqui - Xichen al rescate.
