Último capítulo

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Lysander me miró sin pestañear durante varios segundos, hasta que dijo:

—Niña...

—Dime...

—Sí.

—¿Sí?

—Quiero ser tu novio —Sonrió.

Era la chica más afortunada... Un monosílabo me hacía tan feliz. Lo abracé y por poco lloré de emoción. Nos dimos un beso con timidez y él fue entrando en confianza.

—Lyazdner...

—Sí, niña.

—Quiero hacer algo...

—¿Qué cosa?

—Ya lo verás...

De pronto, el conserje apareció caminando por el pasillo y nosotros nos escondimos en los arbustos, dejando la puerta abierta.

El conserje pasó de largo la habitación en primera instancia, pero luego se detuvo y regresó al mismo. El tipo ingresó a inspeccionar.

Lysander y yo nos mantuvimos en un mutismo total. Cualquier movimiento brusco y el conserje nos llevaría a la dirección.

Caminamos encorvados hasta buscar una salida a esta encrucijada.

Al encontrar un pasillo expedito, yo tropecé y Lysander cayó encima de mí y terminó con la cabeza cubierta con mi falda otra vez.

—¿He dicho que me gustan tus bragas? —susurró.

—Me siento avergonzada, pero gracias...

Minutos después, le agarré de la mano y lo llevé al cibercafé más cercano.

—¿Qué haremos? —preguntó él.

—Solo mira... Te enseñaré a jugar un juego que me encanta.

Abrí Yandere Simulator y también lo hizo Lysander.

—Pero no se jugar.

—Yo te enseñaré.

Jugamos hasta que no hubiera mañana. Mi sueño se había he hecho realidad.

Fin

Secreto de bragas ©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora