Rebel Babies (En edición)

059

En un cálido día de octubre, con los pájaros cantando, el sol en su máximo punto, el cielo celeste y las nubes casi invisibles, Hwang Hyunjin supo que estaba perdido. Sus ojos siempre se dirigían al mismo lugar, al mismo rostro. Como un extraño imán humano.

Y antes le había sucedido, claro que antes se había sentido atrapado por otras personas, con deseos de pasar una tarde completa a su lado. Pero todas esas veces sólo se trataba del chico perfecto que sus padres siempre quisieron que fuera. Posiblemente perdió la cuenta de tantas veces que invitó a salir a unas cuantas chicas, todas encantadoras, simpáticas, graciosas, lo que cualquier chico de su edad desearía. Y aun así, Hyunjin jamás se sintió afortunado por llamar la atención de ellas. Es más, se sentía como una mentira, como una película que tarde o temprano tendría su final, y no precisamente el final que todos querrían.

Yang Jeongin es diferente.

Desde la primera vez que lo vio, en aquél primer día de clases donde lo empujó por accidente y éste voló por los aires, hasta aterrizar en el duro piso de la escuela. Desde entonces está seguro de que los ángeles existen. Y todo lo que creía con anterioridad, se vio reemplazado por su rostro, su sonrisa, sus ojos y la manera tan tímida en que actuaba a su lado.

Jeongin podía actuar como un chico atrevido por medio de chat, le salía increíble, Hyunjin se sintió cohibido muchas veces. Llego a creer que no podría estar en un mismo lugar junto a Jeongin sin terminar escapando. Pero muy lejos de éste, no es más que un niño que se sonroja y dice chistes para no ponerse más nervioso.

Como estaba actuando justo en ese momento, luego de que ambos hubiesen ido a comprar helado y sentarse en el césped de una plaza cercana.

─¿Qué me ves? ─le preguntó con las mejillas encendidas. Hyunjin quiso apretarlas.

─Ahora no te puedo mirar, genial ─desvió la mirada hacia los grandes y verdes árboles que adornaban la preciosa vista─. Pero tú sí puedes, es un poco injusto, ¿no crees?

Jeongin rió, y en cuanto Hyunjin volvió a observarlo, sólo pudo perderse en sus ojitos brillantes y los labios rosados. Casi por instinto, Hyunjin lamió los propios con sabor a helado de chocolate.

Quería besarlo.

Pero si había algo que Hyunjin nunca se atrevió a hacer, una línea que jamás pasó, era el contacto físico.

No lo malinterpreten, no es como si el único hijo varón de los Hwang detestara tener personas cerca o estirar un poco las manos para tocar la piel de otra persona. Es más, creía ser una persona muy cariñosa, sólo que a su propio ritmo. Y dicho anteriormente, Jeongin es diferente, con Jeongin siente que lo arruinará. Que un día haría algo incorrecto y el chico se alejaría de él para siempre.

Sí, es algo paranoico. Y también le atribuía un poco de culpa a los dos años que los diferenciaban. Allí habían más razones para creer que el mínimo acto iba a asustar a Jeongin.

Pero por primera vez en sus diecinueve años quería comenzar él. Por primera vez tenía la necesidad de iniciar algo por cuenta propia, sin que nadie más se lo dijera o se lo diera en bandeja. Era extraño, diferente, emocionante. Todas las sensaciones que recorrían su cuerpo cuando lo tenía cerca.

Con suavidad, y por poco suspirando, tomó la barbilla del menor como si se tratara del más frágil cristal. Los brillantes ojos de Jeongin se fueron abriendo en cuanto notó su intención, hasta vio cierto pánico. Hyunjin lo entendía, estaba pasando por lo mismo. Romper sus propias costumbres para realizar unas nuevas. Las veces que se habían besado, fue porque Jeongin lo comenzó y Hyunjin no pudo resistirse a los suaves labios y la sonrisita que se le formaba en medio del beso, luego se había a acostumbrado a esperar que el chiquillo decidiera hacerlo, al igual que un perrito esperando a su dueño. Pero esta vez sería diferente.

Unió sus labios, el sabor a chocolate amargo y la fresa también se unieron. Sus labios se movieron al compás, encajando a la perfección, dos piezas que en algún momento debían encontrarse y unirse, porque ese era su lugar. A Hyunjin no le importó el helado que comenzaba a derretirse y tocar sus dedos, toda molestia se volvía mínima si tenía a Jeongin frente a él.

Se separaron con lentitud, sin dejar de mirarse y con la mano de Hyunjin todavía en la barbilla del más pequeño.

─Tú... ─su delicado rostro se veía esperanzado, sorprendido─. ¿En serio acabas de hacerlo? Pensé que...

─Me dejé llevar ─dijo rápido, interrumpiendo al menor─. Hice lo que creí que debía hacer.

Y Jeongin sólo supo sonreír. Ante los ojos de Hyunjin, la sonrisa más lindas que jamás haya visto. Un simple gesto que superaba cualquier tonto placer de niño rico que tuvo alguna vez. Ningún capricho se asemejaba a lo que era la personita frente a él. Ni todo el dinero de sus padres podrían darle las mil sensaciones que lo arrastraban.

Por todo esto, Hyunjin sabía que estaba perdido, que tal vez tendría consecuencias y no todo marcharía perfecto al igual que en su tonta e inocente cabecita. Pero no por cualquier persona, no por cualquier razón.

Hwang Hyunjin estaba perdido por Yang Jeongin, y realmente, no sabía si quería que lo encontraran.

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CHAT ENTRE
JISUNG Y CHENLE.

Han 💕
VENGO CON TODA LA FE Y CONFINZA A APOSTAR, MI REY

Chenlito.
¿Qué te traes?

Han 💕
ay, pero dímelo bonito

Chenlito.
¿Qué quieres, conchetumadre?

Han 💕
así es como me gusta JAJAJJAAJAJAJAJA
¿cuánto apostamos a que Hyunjin va a terminar el año con pareja?

Chenlito.
Ay, no sé, no apuesto por porquerías JAJAJAJJAJAJAJAJAJAJJAAJ

Han 💕
APOSTEMOS POR FAVOR
NECESITO DINERO

Chenlito.
DESGRACIADO DE MIERDA

Han 💕
es mentira, no te creas
aunque si quieres...
nunca hay que negar un regalo, mucho menos de un amigo especial

Chenlito.
Yo no le tengo fe a Hyunjin, ¿acaso tú sí?

Han 💕
la verdad es que no xd
PEROOOOOO
siempre hay excepciones, nunca se sabe

Chenlito.
Y crees que Jeongin lo será, ¿no?
Jisung, sabes cómo son de locos sus padres.
Antes muertos que Hyunjin rompiendo las mil y unas reglas que le tienen.

Han 💕
PERO NO ME HABLES FEO
YO SÓLO QUERÍA APOSTAR Y TE PONES FILOSÓFICO POR LA CONCHA

Chenlito.
TÚ EMPEZASTE
SI SABES QUE SOY MITAD ESCORPIO Y SAGITARIO, POR QUÉ ME BUSCAS CONVERSACIÓN CON TEMAS ASÍ

Han💕
TUS SIGNOS NO TIENEN NADA QUE VER CON QUE SEAS ESTÚPIDO

Chenlito.
Claro que los signos tienen que ver.
Tú eres virgo y eres virgo, ¿ya ves?

Han 💕
JAJAJJAJAJAJAJAJAAAJ QUIÉN HABLÓ