Ellos llegaron a un acuerdo, parecía que los beneficios mutuos eran suficiente, ninguno de los dos se imagino mas de lo estipulado, jamás pensaron en ello, no se conocían, al final era solo un buen trato, una solución para sus problemas, ¿El mejor a...
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Giyuu besaba el hombro desnudo de Shinobu mientras ella se despertaba lentamente, el jamás se cansaría de su olor, del sabor de su piel, Giyuu había estado con muchas mujeres, más de las que pudiera recordar pero ella era la única que lo acompañaría siempre en su pensamiento, si tuviera que compartir su cama con alguien más sabia que sería opacada por Shinobu, en su mente cada recuerdo sería mucho mejor que cualquier otra persona, no sabía como pero debía de haber una forma para alargar esto, si ella quería sexo él estaba dispuesto a dárselo ...sin una fecha.
-¿Tengo cara de paleta?- murmuró Shinobu mientras él sonreía, ella se giró para quedar cara a cara y beso sus labios.
-Siempre tan romántica y delicada- se burló Giyuu y Shinobu lo volvió a besar, haciendo que el la atrajera, aún permanecían desnudos, Shinobu se dio cuenta que extrañaría esto, la sensación de despertar con él, de su cuerpo rozante contra el suyo, pero no quiso pensar en eso, no por ahora.
-Si seguimos así no lograras sacarme de la cama- le susurró Giyuu mientras ella quedaba recostada en su pecho.
-Pues no lo hagas...vamos a quedarnos así- pidió Shinobu besando tenuemente su piel
-¿Quien eres y donde esta mi adorada socia?- bromeó y Shinobu le dio un golpe en el estomago.
-Es la mejor idea que has tenido chica mariposa- continuó mientras la besaba y comenzaba a acariciar sus pechos.
-Me refería a descansar genio- le murmuró en un tono de voz que pedía más.
-Mmmm- Giyuu beso su cuello y comenzó a hacerle cosquillas.
Se quedaron así casi toda la mañana entre bromas y siestas, besos y caricias furtivas, que solo excitaban la imaginación, ambos quería alejarse de la realidad, de una realidad en la cual su tiempo terminaba deprisa y aun no podían aclarar los sentimientos que los embargaban.
Shinobu comenzó a sonrojarse solo de pensar que nadie tocaba a la puerta pues sabia que Uzui la esperaría con sus bromas o Amane la miraría con ese brillo en los ojos de complicidad y amor maternal.
Giyuu acariciaba su vientre tumbado boca abajo, con los ojos cerrados, Shinobu tenia sus manos en el cabello de el también con los ojos cerrados, había mirado su reloj, hace poco que marcaba pasadas de la 1 de la tarde, en realidad llevaban bastante despiertos pero el había cumplido lo que ella quería, Shinobu sabia que de ser posible se quedarían así todo el día pero había una cosa que tal vez les impediría seguir de esta forma, ya era casi hora de la comida y no habían ni desayunado.
El estomago de Shinobu gruño bajito para acentuar su pensamiento a lo que Giyuu sonrío.
-¿Hambre?- murmuró de manera socarrona
-No es el ruido que hago con mi estomago cuando ha sido suficiente de la cama- replicó Shinobu de forma sarcástica, Giyuu la beso lentamente antes de levantarse.
