• Cena con el diablo •

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Blair

Todo el día estuve sola mientras Nick y Jordan charlaban.

A lo largo del día,

Jordan me miró de forma extraña mientras yo lo miraba fijamente, tratando de distinguir cualquier cosa mala que hubiera hecho. 

Pero no había nada. 

Parecía un adolescente inocente, como siempre. 

También parece un jugador, pero eso está fuera de tema. 

Ahora mismo estaba parada afuera, esperando a que Zayn me recogiera.

—Blair-.  Escuché detrás de mí.

—¿Si?- Respondí, dándome la vuelta para ver a Jordan. 

—¿Necesitas transporte?-  Preguntó mientras se acercaba a mí. 

—No, gracias.-  Respondí, mirando hacia abajo a la hora. 

Estuvo en silencio por un rato. 

Se paró a mi lado y se metió las manos en los bolsillos antes de hablar.

—Probablemente se olvidará de nuevo-  Dijo, mirándome.

—¿Otra vez?- Cuestioné. 

—Sí. Se olvidó de recogerte antes, ¿verdad?- Preguntó. 

Mi corazón se hundió en mi estómago. 

—¿Cómo lo sabes? Tu aún no estabas en esta escuela.-  Lo miré con curiosidad. 

—Yo- Hizo una pausa cuando vimos el auto de Zayn estacionarse.

Suspiré silenciosamente de alivio, no queriendo estar más cerca de Jordan.

—Supongo que te veré más tarde.- Dijo, todavía mirándome.

—Mhm.-  Murmuré, mirando como Zayn se detuvo y salió del auto.

Caminó alrededor del auto y se paró frente a mí antes de mirar a Jordan con frialdad. 

—Vamonos.-  Dije, caminando hacia la puerta del auto en el lado del pasajero. 

Zayn se acercó a mí y abrió la puerta, esperando a que entrara.

Lo hice y él cerró la puerta, sin apartar los ojos de Jordan mientras caminaba alrededor del auto. 

Abrió la puerta y se quedó allí un rato más, luego abrió la puerta y entró.

—Matarlo en tu cabeza no ayudará, Lucifer-.  Dije rodando los ojos.

Luego me miró, sus ojos fríos se posaron en los míos. 

Inclinándose, besó mi mejilla. 

—Siempre lo hace-.  Dijo sombríamente, saliendo de las puertas de la escuela.

—Zayn-  Llame. 

—Mhm.-  Respondió, mirándome brevemente.

—Tengo hambre.-  Dije, mirando mi estómago.

—Lo sé-.  Dijo profundamente, con una pizca de humor en su voz mientras hablaba. 

Condujo durante un rato, frotando el dorso de mi mano con el pulgar. 

Miré hacia abajo para ver nuestros dedos entrelazados. 

Ni siquiera vi cuando hizo eso. 

Nos detuvimos en un restaurante llamado "The Kitchen".

Lucifer usa cuero [En Edicion]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora