Dumbledore, mí salvador

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-________________ despierta-me decía Ginny.

-Mmmm-me queje.

-Levántate vamos es por la tarde ya-me comento.

-¿Qué?-pregunte levantándome de un salto-dime que todo esto a sido un sueño-la pedí.

Ginny parecía triste.

-Me temo que no-respondió apenada.

En ese momento me senté en la cama.

-Lo ha conseguido-susurre.

-¡No quiero que te vayas!-grito Ginny abrazándome fuertemente.

-Yo tampoco quiero irme-la abrace yo también.

Me levante de la cama y me baje a la Sala Común donde estaba Fred sentado en el sofá.

-Hola-le salude sentándome a su lado.

-Hola-me saludo pasando un brazo por mis hombros.

Estábamos callados, ninguno decía nada y era incómodo.

-¿Qué va a pasar ahora?-pregunto Fred.

-No lo sé-respondí.

-Te quiero-me dijo.

-Yo te amo-le dije mirándole y juntando mis labios con los suyos.

Después de un rato decidí pasear por los pasillos cuando me encontré con la profesora McGonagall.

-Acompáñeme-me ordeno.

-Si-susurre siguiéndola.

Nos dirigimos al despacho del directo donde estaban Dumbledore, Umbridge, Hagrid, Snape y otro señor que no conozco.

-Siéntate querida-me ofreció Dumbledor.

-Gracias-le agradecí.

-Es curioso, siempre has sido una chica ejemplar, estudiosa y respetuosa de eso no me cabe la menor duda y aun sabiendo lo que has hecho, sigo pensando lo mismo-me dijo Dumbledore guiñándome un ojo en la última frase.

Yo le sonreí.

-Dumbledore, esta estudiante tiene que mejorar sus modales-se quejó el señor.

-Señor Crouch, claramente sus modales no fueron los correctos pero sus motivos tendría-me defendió Dumbledor.

-Esta niña lo que necesita es irse de este colegio y que la eduquen como es debido en su hogar muggle-soltó de repente cara sapo con su irritante voz.

-Ya te hemos escuchado millones de veces Dolores-dijo Dumbledore.

-_______________ no seria capaz de comportarse así sin ningún motivo-me defendió Hagrid.

-________________ te hemos llamado aquí para que nos des explicaciones-me explico Dumbledore.

-¿Qué quieren saber?-pregunte.

-¿Por qué tuviste un comportamiento indebido con la Profesora Umbridge?-me pregunto.

-En primer lugar, quiso dar las clases de DCAO sin utilizar la varita y me negaba a dar una clase donde no iba a aprender nada y obviamente se que en eso tuve la culpa yo, en segundo lugar, yo a esta mujer le tendré respeto cuando deje de hacer dos cosas muy obvias, la primera es que ha estado hiriendo a algunos de sus alumnos y en segundo porque es incapaz de afirmar que Voldemort ha vuelto-respondí.

El señor Crouch y Umbridge metieron un grito ahogado.

Dumbledor me sonrió.

-Que niña tan insolente-se quejo Umbridge.

Siete días (Fred Weasley y tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora