Todo cambia contigo ·Elmax· EN EDICIÓN

¿Que está pasando aquí?

El día siguiente lo pasaron las dos juntas; fueron de compras al nuevo y mejorado Starcourt y se quedaron hablando con Robbin en su hora de descanso.

-Eso está genial Max. Y a ti, Once, ¿que tal te va?- dijo Robbin.

Pero Ce no estaba prestando atención a la conversación. Su mente se había desviado hacia pensamientos espantosos.

-¿Ce? ¿Estás bien?- Preguntó la pelirroja preocupada.

La pequeña se tapaba los oídos en el intento de silenciar todo eso, pero conseguía todo lo contrario. Las lágrimas no tardaron en aparecer. ¿Por que le estaba pasando esto? ¿Por que le pasaba de repente algo que nunca le había pasado?

-¡Ce!

La pelirroja corrió hacia la pequeña y se agachó delante de ella con sus ojos llenos de lágrimas que esperaban ansiosas resbalar por sus mejillas.

-¡Ce! Tranquila Ce, estoy aquí. Tranquila...

De repente, la mente de la morena se calmó. Ella cayó al suelo del cansancio mientras la pelirroja la abrazaba.

Steve, que había oído los gritos, terminó de atender a la gente de la cola y fue corriendo a ver que pasaba, pero al ver como estaban las dos pequeñas, decidió que lo mejor era no molestar.

-Ce, ¿quieres que vallamos a casa?- Max estaba demasiado preocupada como para dejar que siguiera allí, así que la ayudó a levantarse y se fueron.

-¿Necesitáis ayuda?- Robbin quería acompañarles, era lo más entretenido que podría hacer ese día. Además, quería enterarse de todo.

-No, gracias Robbin.- contestó Max agradecida.

La pequeña estaba demasiado cansada y asustada como para decir nada ni levantar la vista del suelo, pero decidió que debería mirar a Max y pedirle perdón por todo. La miró y no se atrevió a decirlo, pues vio las lágrimas que caían por sus mejillas.

-Max... Estás llorando.