In Your Eyes / Z.P

IV

Los últimos días de la semana pasaron volando, ni siquiera los había sentido llegar.

El trabajo y la escuela me habían tenido muy ocupado, y no podía estar más agradecido. Tener la mente llena me hacía sentir menos miserable con todo el asunto del caso de Zayn.

Niall había estado conmigo durante las noches, hablábamos de cualquier cosa mientras cenábamos y luego jugábamos con la consola hasta caer dormidos. Me gustaba el hecho de que ocultaba su cansancio para pasar tiempo conmigo sabiendo que me encontraba tan decaído.

Me levanto de la cama y camino hasta el baño, me quitaría la barba. Estaba algo cansado de mirarme así, quizá también pasaría a la peluquería pero por ahora no había tiempo, Louis pasaría por mi en una hora para irnos a Dublín.

Estaba muy nervioso , algo me decía que no debía ir, pero no sabía que era exactamente.
Sin embargo, una pequeña punzada en el pecho me pedía que solo me relajara.

Quito mi ropa sucia dejándola en el cesto de la entrada y entro a la ducha dispuesto a despejar mi mente de todas las dudas. Louis confiaba en mi para esto y no lo defraudaría solo por mis lagunas mentales.

Sinceramente estaba emocionado de hacer esto, planear una boda era increíble. Claro que podía ser estresante y más para los novios, pero para mi era como una actividad recreativa.

10 minutos más tarde, salgo directo a la habitación para vestirme. Nunca había ido a Dublín así que el clima sería el problema.

-Buenos Días, Li- dice el rubio estirándose fuera de la cama.

Su cabello estaba revuelto y algunos rastros de sudor bajaban por su pecho.

-Buenos Días, ¿Dormiste Bien?- pregunto sacando unos jeans negros

-Si, gracias. ¿Hoy te vas?- chasquea la lengua

-Si,Louis vendrá en unos minutos más.-

-Bien, No te vayas sin despedirte- sonríe

Le devuelvo el gesto y termino de vestirme.
Hoy sería un día bastante largo.

**

-Pero entonces dijo "Lou, pedí la crema de Espárragos"- dice el ojiazul cruzándose de brazos

Louis se encontraba quejándose conmigo sobre la elección del rizado para la cena de la boda. Al parecer no le había hecho caso con su odio a los alimentos verdes. Sonrío enternecido.

-Bueno, al menos no pidió algo con aguacate-

El más bajo rueda los ojos divertido y me toma de la mano para caminar directo a nuestro asiento. El tren era completamente hermoso, jamás me había subido.

Recuerdo que cuando tenía unos 7 años mi padre me había llevado a conocer los vagones, pero jamás había hecho un viaje. Los amplios ventanales, los asientos acolchados y unas cortas mesitas que parecían tan frágiles como una hoja de papel.

Cuando por fin encontramos nuestro asiento, nos despojamos del abrigo. Suerte que había exagerado con el clima que haría o estaría tiritando de frío.

-¿Listo para llegar a Dublín?- pregunta Louis cruzándose de brazos

-Si- miento - Estoy bastante emocionado.

-Me alegra, será divertido- sonríe de lado antes de acomodarse para tomar una siesta.

Era temprano, y a decir verdad yo también tomaría una. El cansancio de la semana comenzaba a pesarme y mis párpados caían como por arte de magia.