I'm Tania

Kisses

El viaje de vuelta fue largo e intenso, demasiado, Javier se quedó dormido, asique tuve que estar casi siete horas conmigo misma y el mocoso de detrás, saqué la piedra del agua y me quede mirandola detenidamente, era del tamaño de mi mano del azul más puro que te puedas imaginar, tan brillante como los ojos de Damon, espera, de verdad había pensado eso? Sí, lo había hecho, pero tenía demasiadas osas en la cabeza, javier se movió e hizo que se me callese la piedra al suelo.
-Mierda. -Dije entredientes-. -Damon.-Segui susurrando.
Casi todo el avión estaba dormido, ya que rozabamos las tres de la madrugada.
-Dime dijo desde los asientos de al lado.
-se me ha caido la piedra.- dije con miedo.
-Que se te ha caido, qué? -dijo enfadado.
-se ha ido para atrás.
-Joder, Tania, que manazas eres. -dijo levantandose enfadado.
-Buscais esto? -dijo una chica por detrás.
-sí. -dije cogiendola.- Gracias.
-De nada.-Dijo una pelirroja mirando a Damon con descaro.
Cogí la piedra y me incorporé y pude ver que brillaba pero d euna manera peculiar, ahora era más rojiza.
Decidí no decirle nada a Damon, y me dormí un rato.

Me despertaron unos labios en mi cabeza, abrí los ojos y ví a Damon alejarse, ya se habían bajado todos, solo quedabamos nosotros.
-Perdona por haberte hablado así ayer, discutí con Sidney...
Asentí -No pasa nada. -dije levantandome del asiento.

El sol brillaba con fuerza, cosa que se agradecía muchísimo.
Subí corriendo a mi habitación y me tiré en la cama como si fuese de algodón, guardé la piedra en un cajón y salí para saludar como era devido a mi madre. Cuando salí de la habitación oí a Sidney discutir con Damon en su habitación.
-...me da igual, pero a ella no le dará... Si estoy hablando contigo es por ella... -Dijo damon.
-...no puedo hacer nada.... La cagué Damon....-Dijo sollozando sidney.
Sin querer moví la mesa con el jarrón e hice quese callese el jarrón, provocando que Damon saliese enseguida.
-Qué haces aquí Tania?
-Qué pasa Damon, qe esta pasando?
-Tania, es complicado...
-Nada lo es, dimelo...
Sidney salió en ese instante.
-Yo se lo digo Damon. -Dijo Sindey mientras damon abandonaba la sala. -Besé a Javier, Tania.