Día 14

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Todavía veo tu sombra en la habitación ... – sonaba la canción y en ciertas partes Daiki cantaba – Y no puedo cambiarte, así que debo reemplazarte, oh.... Es más fácil decirlo que hacerlo, pensé que eras el único

Vamos Daiki deja de cantar eso, ya te pedí perdón – mencionaba un pelirrojo desde detrás de la puerta –

Como decía debo reemplazarte ohh – mencionaba un Daiki sobre la cama tapándose la cara con la almohada –

Vamos Daiki piensa en la pequeña princesita seguro me quiere sentir y tu debes tener hambre – al pronunciar a su beba el moreno toca su abultado vientre sonriendo –

No me harás cambiar de opinión Bakagami – gruñía desde el interior de la habitación –

¿Qué le hiciste papá? – mencionaba su hijo Nao –

No le hice nada – decía un desesperado pelirojo –

No le mientas a nuestro hijo – gruñía Daiki – rompiste mi jarrón favorito Kagami Taiga, eso no tiene perdón

Papa – el pelirojo mira a su hijo – te doy mi pésame, me voy con el tío Kouki no quiero sufrí tu suerte

Nao no me dejes... - no termino de decir la frase cuando su hijo se marcho como si fuera el viento, tan veloz – rayos... Vamos Daiki dime que puedo hacer para que me perdones, fue un accidente

¿Puedes repararlo? – el pelirojo dijo que no – entonces Kagami Taiga tu sentencia es dormir en el sofá hasta que esta beba nazca

Por favor Daiki no nos hagas esto, te puedo conseguir un jarrón mucho más bello que el que tenías – se abre la puerta y se muestra un moreno con lagrimas en los ojos –

Mas te vale que consigas uno rápido porque te necesito – Taiga rodea al moreno en un abrazo y el contrario se acurruca entre su pecho – malditas hormonas 

Fictober 2020 - KagaAoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora