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CAPÍTULO 24
"¿𝐓𝐚𝐦𝐛𝐢é𝐧 𝐞𝐫𝐞𝐬 𝐢𝐧𝐡𝐮𝐦𝐚𝐧𝐚?"
Preguntó Jemma de repente para interrumpir el silencio incómodo que empezaba a llenar la habitación.
Yo-yo no se esperaba esa pregunta, ¿Daisy les había hablado de su gente? Diablos, si que confiaba en esa gente, seguían vivos, "¿Daisy os lo dijo?"
Los ojos de Jemma se ensancharon cuando se dio cuenta de que podría haber metido a Daisy en un lio con su gente. Sabía lo reservada que era Daisy con su gente, "Oh... no."
Yo-yo no se creía que esta chica trabajara para una organización secreta. Era una mentirosa horrible, "Si sigues viva, es porque Daisy confía en ti." Dijo simplemente. Vio una sonrisa aparecer en la cara de Jemma sin embargo, los otros dos en la habitación aún la miraban sospechosamente, no les culpaba, pero no confiaba en ellos.
"Así que, ¿estuviste en Hydra?" Preguntó Bobbi, al contrario que Daisy, esta mujer era más mayor que ella. Tenía treinta y cinco años y, si tuviera dinero, apostaría a que esta inhumana se había unido a Hydra voluntariamente, al contrario que Daisy.
Yo-yo la miró, era alguien con quien tenía que ser precavida, sabía que la joven científica y el pequeño ingeniero a su lado, no eran amenazas, pero las otras dos mujeres lo eran. Colocó un brazo sobre su pecho y la miró, "Lo era."
"¿Por qué te uniste?" Interrogó Bobbi, no le gustaba la vibra que Yo-yo daba, el sentimiento era mutuo.
"Porque pagan bien." Respondió Yo-yo con una sonrisa, esa no era la respuesta real. Su razón tenía que ver con liberar a su gente. Algunos miembros de su familia habían sido acusados de un crimen que no habían cometido, a cambio de la autorización, se uniría a Hydra y entrenaría para convertirse en un soldado.
A Bobbi no le gustaba, tampoco le gustaba el hecho de que Yo-yo fuera amiga de Daisy. Yo-yo era lo suficientemente mayor como para tomar sus propias sus decisiones, no la habían obligado a tener esa vida como Daisy. Iba a preguntar más cosas pero antes de que pudiera, May y Coulson entraron.
Yo-yo les había dado las coordenadas, pero pensaba ir con ellos, no pensaba dejarles ir a Afterlife solos, tenía un mal presentimiento, Daisy había hablado como si fuera una misión suicida, "Vamos a Afterlife," sabía que ya conocían el nombre, pero no estaba segura de cuánto sabían.
"Lo sabemos." Gruñó May molesta, no estaba de ánimo como para seguir en el bucle. Por primera vez en seis meses, la ansiedad que escondía en el estómago empezaba a moverse por sus venas mezclada con una pizca de enfado hacia Daisy por haber llevado todo esto ella sola, "¿Qué significa para ella?"
