¿Alguna vez han experimentado lo que es estar enamorado de una persona y tener que actuar como si no importara?
¿Saber tus sentimientos y que tu mente les de significados día y noche pero aún así, tus labios no los vuelven reales y tu cuerpo no los...
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El segundo día de universidad no fue malo en lo absoluto. Todo marchaba adecuadamente, Jennie y Rosé habían recogido sus horarios luego de su parada en la cafetería y habían conocido a todos sus profesores, quienes se mostraron muy amables a primera vista.
Si bien no estudiaban la misma carrera, compartían algunas clases, como comunicación y lenguaje, o fotografía. Jennie tomó las optativas de Arte digital y Color, las mismas que su más cercana amiga.
Jennie veía una chispa en Park Roseanne, siempre lo hizo.
Ella estaba llena de tanto color y pasión, aunque parecía reprimirlo, como si estuviera incomodando a alguien. La mayor le recordaba siempre que podía hablar también de lo que le gustaba, tal vez sobre cuanto le gustó una paleta de colores, y cuanto le encantaría aplicarla en sus actividades.
Pero Rosé la evitaba diciendo que ella era mejor escuchando. Jennie ha vivido casi toda su vida pegada a la chica mas pequeña, y sabe porqué Park Roseanne esquiva a toda costa hablar de lo que encanta.
Hubo una época en la que Rosé se había mudado de distrito, y ya no vivían tan cerca como antes, seguían estudiando en la misma escuela, pero ya no podían ir a la casa de la otra luego de clases. La menor había conseguido nuevos amigos en el distrito, parecían amables, ella realmente disfrutaba estar con ellos. Pero no todo es lo que parece, y pronto Rosie cada día que pasaba hablaba mucho menos alegre. No compartía tanto en los debates y se guardaba casi todo en las clases que más le gustaban.
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Jennie sabía que algo pasaba con su amiga, así que planearon una reunión en la cual la menor aprovechó de presentarles a sus nuevos amigos. Jennie los miraba con recelo, pues muy en el fondo, sabía que esos zánganos tenían algo que ver con la falta de felicidad en Rosie.
Así que vio su oportunidad cuando la más pequeña entró a buscar agua para todos, Jennie estaba recostada en la fachada de ladrillos de los señores Park, cuando logró percibir murmullos del otro lado. Siempre había sido buena oyente.
"¿Por qué habla tan extraño?" "¿Quien le llama 'hierba' al césped?" "Es una tonta" "Sus padres seguramente pagan para que le pasen las clases." "¿Y su amiga? La otra niña rica, parece que en cualquier momento hará un berrinche si no haces lo que quieres al instante"
Ahí Jennie dibujó la línea. Esos mocosos se estaban aprovechando de la buena voluntad de Rosie, y ella no iba a permitirlo.
La castaña era sutilmente más alta que aquellos niños, fácilmente podía intimidarlos.
—Si tanto les molesta la manera en la que habla, y creen que es una tonta, entonces deberían largarse de una buena vez. No quiero volverlos a ver junto a Rosie.—Sentenció. Los ojos afilados registrando cada facción. Pero claramente la pandilla de atrofiados lo tomó de burla.
