Capitulo 1

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—Sasuke, debemos ir

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—Sasuke, debemos ir. —Naruto Hablo apoyado al marco de la habitación.

—No me despediré de ella, porque no está muerta, Sakura va a volver. —Hablo con molestia mostrando los colmillos.

—Bien, no me muestres los colmillos, Sakura-Chan se fue y no volverá; ese era su destino, así era la profecía —Sasuke se levanto con súper velocidad de la cama arrinconando al rubio contra la pared mostrándole nuevamente los colmillos. —Deja de mostrarme los colmillos, no me hagas usar la fuerza contra ti. —Lo retó

—¿Y nuestro destino? Ella tiene que morir dejando todo lo que habíamos planeado. —Hablaba con un nudo en la garganta.

—Teme, debes superar esto, debemos ir. —Habló

Sasuke lo soltó sin ganas de querer pelear para luego ponerse sus zapatos, ambos salieron de la habitación sin decir ni una palabra, caminaron por los pasillos hasta llegar a la planta principal donde estaban reunidos muchos alumnos esperando las puertas fueran abiertas para poder entrar al patio principal donde hace días había ocurrido aquella profecía.

Naruto miró a su amigo quien estaba con la mirada en blanco rogando para que no apagara su humanidad o las cosas no serian lo mejor para todos, el resto de sus amigos se acercaron a ellos mirando al rubio como si indagaran sobre el azabache.

Las puertas fueron abiertas dejando que todos caminaran hasta el patio principal, había un pequeño escenario donde Tsunade estaba de pie en medio de Jiraiya y Orochimaru.

—Bienvenidos todos, como saben hace días nuestro linaje sufrió una catástrofe donde una profecía se cumplió y gracias a eso no se perdieron vidas, por ese sacrificio hoy estamos aquí por lo cual este día será histórico, marcaremos una lápida para aquella persona que dio su vida por nosotros. —Muchos comenzaron a aplaudir mientras otros que era lo suficientemente cercanos lloraban en silencio aquella pérdida.

Jiraiya con ayuda de Orochimaru descubrieron una estatua tallada en bronce de una joven con un fénix detrás de ella, la cual estaría junto al gran roble, durante todas las décadas siguientes puesto a que dicha profecía se marcaría por siempre y el recuerdo de aquella persona viviría siempre en los corazones de todos, de unos más que otros, se hizo su reverencia junto a las ofrendas para que luego todos pudieran retomar sus actividades.

Desde lejos un grupo de chicos y chicas veían a un azabache arrodillarse delante de la estatua lo cual sería lo que marcaría por siempre aquella persona a la cual amo.

—¿Como lo viste? —Neji Hyūga volteó a ver a Naruto

—Negación, no acepta que ya no esté y cree que la profecía no debió ser así —Hablo

—Hinata, tú fuiste la última que estuvo con Sakura, ¿Menciono algo?

—Ella, dijo que el anillo no se le quitaría del dedo salvo que alguno muriera, Sasuke se lo dijo después que ella se lo tirara al pecho y él mismo lanzara el hechizo. —Hablo.

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