Capítulo 07

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— Dices que no es mucho, eso no era lo que yo vi.

— Bueno eran mil quinientos sé que es mucho, pero tengo dinero guardado — estaba triste — lo estaba ahorrando para comprar una casa y en futuros un restaurante, pero ya no es necesario una casa ya que vivo contigo.

— No te preocupes igual es tu casa, por lo tanto, dormiré en el sofá.

— Aunque no es lo mismo, pero gracias y no crees que es muy pequeño para ti.

— Estás preocupada por mí — me acerco — quieres que duerma contigo — abrazo su cintura.

Me aparto rápido — no es eso, estaba pensando que tu duermas en la cama mientras yo durmiera en el sofá.

Se aparta de mi con nerviosismo — no te lo permitiré mientras tu trabajas y vienes cansada, no pienses mucho tu duerme en la cama y yo en el sofá he dormido en peores lugares si sigues discutiendo terminare durmiendo contigo.

— Al decir eso empezamos a dormir cada quien en su lado al principio él no encontraba alguna posición y yo me reía, para sentirse cómodo le pedí que durmiera conmigo pero no quiso por lo tanto ya no se lo comente, el restaurante era muy pesado y era una prueba estar organizada con el personal la apertura fue todo un éxito paso volando los días ya solo quedaban dos días para marcharnos, me iría muy contenta a casa con una estrella michelin y la prueba realizada, luego recibí una llamada inesperada de mis padres se dieron cuenta que yo me encontraba y pedían que me reuniera con ellos en casa sin ganas de ir fui con Rodrigo a almorzar.

— Que crees que desearan tus padres.

— No lo sé, es muy raro en ellos, hoy que es mi día libre iremos de compras al centro comercial.

— No puedes comprar un regalo en una de las tiendas por tu trabajo.

— Aparte del regalo necesito ropa y tú también.

— Sabes que yo no necesito.

— Se que tienes mucha ropa, pero no tienes un traje formal para la ocasión por lo tanto te ayudare a encontrar uno.

Entramos en un almacén y fuimos directo a la sección de hombres no tenía idea de lo que iba hacer por lo tanto solo la escuchaba, llego otra mujer de las que atendía mientras que Sofía iba diciendo algunos que otros nombres de las vestimentas.

— Pruébate esté mientras busco otros — lo veo entrar — me ayuda a buscar.

Mientras yo me disponía a tallar me el traje de tres piezas ella buscaba, fue un gran error darle mi talla el traje era de color rojo solo escuchaba que decía ella "pase me un esmoquin de espiga, ashbyprince de color azul y un beige, un rongking de tres piezas quiero también un lavnis color azul marino el chaleco con las tres piezas" decía más, al terminar salí y me vi en el espejo no estaba tan mal, luego volteo a ver a Sofía y su reacción me encantaba no decía nada la otra mujer igual se quedaba viéndome.

— Pareces un hombre sacado de alguna revista — dije sorprendida y en mi mente es muy guapo — no te queda muy apretado.

— Su esposo es todo un dios griego.

Sabía que era más guapo que ese dios me puse contento cuando esa mujer dijo esposo aunque aún no éramos nada, las compras fueron rápidas ella se compró muchos vestidos alguna que otra ropa y los calzados, ella compro todo tipo de conjuntos al llegar a casa nos cambiamos ella llevaba un skinny negro y una hermosa camisa blanca con tacones beige, mientras yo tenía un pantalón azul con una camisa blanca manga larga y una chaqueta del mismo color del pantalón y la corbata, nos fuimos en un taxi con el regalo en mano al llegar abrió una sirvienta, entramos ella me agarro por el antebrazo al llegar a la sala vimos a Camila y su prometido con sus padres.

El Símbolo del PoderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora