𝟬𝟵

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Era de noche y todos se encontraban durmiendo, exceptuando tres personas.
Una de ellas era T/N, quien estaba caminando por los pasillos de aquel lugar para poder ir a la biblioteca.

En un momento se había encontrado con Isabella, quien le preguntó hacia dónde se dirigía. La jóven le explicó que no podía conciliar el sueño y entonces iria a leer un rato, por lo que la mayor le dejó ir hasta allí con la condición de que no se durmiera tan tarde.

Cuando llegó a la biblioteca, se fue hacia un estante donde había un nuevo tema que le empezaba a gustar  y era un libro sobre las estrellas.

Cuando agarró el libro, se sentó en una de las muchas sillas que había allí y comenzó a leer la página principal del libro, y mientras seguía leyendo, pudo escuchar pasos fuera de la biblioteca, más no le dio importancia porque creía que era mamá, pero no era así.

Las puertas de allí se abrieron, dejando ver a una peli-naranja, quien tenía una leve sonrisa en su rostro. Luego,comenzó a adentrarse en la biblioteca hasta llegar a la silla que estaba en frente de T/N.

—¡T/N! —exclamó alegremente la de orbes (c/o)—. ¿Qué haces aquí tan tarde?

—Oh, Emma —sonrió dulcemente, cerrando por unos instantes el libro para posar su atencion en la recien llegada—. Bueno..., No podía dormir. ¿Tú que haces aquí?

—Aún tengo un poco de energía y pues, supuse que estabas aquí cuando no te vi en la habitación —explicó con sus mejillas ruborizadas, soltando una pequeña risita que delataba su nerviosismo por estar a solas con ella.

T/N se quedó inmóvil, pestañeando varias veces hasta que desvió su mirada, nerviosa de saber que la había buscado. Emma lo entendió y sonrió con pena, por lo que optó por cambiar de tema.

—¿De que trata el libro, T/N? —preguntó Emma, levantándose un poco de su asiento y acercándose a la contraria.

Miró por unos intsantes el libro y luego miró a la oji-verdd, dejando escapar un pequeño suspiro a modo de calmarse.

—Bueno, trata sobre... —murmuró mientras bajaba lentamente su voz—. Las estrellas. Es algo que me ha comenzado a interesar hace poco.

—¿Podrías leer para mi? Me gusta el poder escuchar tu voz, ¿Sabes? —mencionó con una sonrisa dulce.

—E-Esta bien —tartamudeo, avergonzada.

Y con eso dicho, comenzó a leer el libro y las distintas estrellas que había mientras su acompañante prestaba atención a cada palabra que decía la fémina, la cual cada vez se emocionaba más al leer el libro.

Podía ver como sus orbes (c/o) brillaban cada vez más, haciendo que Emma se sintiera feliz al saber que T/N había encontrado otra cosa que le podía hacer feliz a parte de la mitología y la cocina.

Soltó un suspiro de enamorada, llamando la atención de la de hebras (c/c), quien levantó la vista del libro para poder apreciar la imagen de la contraria. Emma sólo sonreía embobada. Estaba muy enamorada para siquiera darse cuenta de su expresión.

—¿Emma? —soltó ella, intentando llamar su atención.

—Yo... creo que perderé la cabeza.

—¿Eh? —soltó confundida—. Emma, ¿De que estas hablan-..? —fue interrumpida.

Finalmente, la de cabellos naranjas se inclinó por encima de la mesa, generando contacto visual con T/N. Acercó con lentitud su rostro hacia el de ella y unió sus labios en un dulce beso, provocando que se sobresaltara notoriamente por tal repentina acción.
Su rostro estaba que ardía en rojo, a la par que sus manos dejaban caer el libro sobre la mesa.

Dudosa de si corresponder o no, finalmente lo hizo. Sus manos se colocaron en las mejillas ajenas, correspondiendo suavemente al beso que Emma le había proporcionado.

Luego de separarse, ninguna de las dos dijo nada y un silencio incómodo se formó en el ambiente.

—Y-Yo lamento haberte besado de repente, T/N —se disculpó repentinamente, avergonzada—. Lo he hecho sin tu consentimiento...

—No, no te disculpes... Además, yo lo he correspondido.

—¡Espera! ¡eso quiere decir que..!

—Sí, los he aceptado—murmuró avergonzada, mientras que con sus manos le brindaba suaves caricias al rostro ajeno.

—¡Se lo tengo que contar a Norman y Ray! —exclamó feliz mientras pasaba hacia el lado de T/N y la abrazaba cariñosamente, dándole besos en el rostro con mucho amor.




—¡Se lo tengo que contar a Norman y Ray! —exclamó feliz mientras pasaba hacia el lado de T/N y la abrazaba cariñosamente, dándole besos en el rostro con mucho amor

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𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗠𝗘,                     The Promised NeverlandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora