Esencia

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Fue un viaje de hora y media, ya estaba anocheciendo, Nezuko estaba dormida sobre mi regazo y la carreta en movimiento se detuvo.

—Aquí es—dijo el conductor

—Se lo agradezco—bajándome—vamos, ya llegamos

—¿hm?

—Por cierto, ¿Irán a ver a algún familiar?

—Enrealidad no

—¿Entonces, por qué un par de chicos como ustedes irían a una ciudad como esta?

—¿Como esta?—confundido

—Así que no lo sabes...—mirándome incrédulo

—Lo siento pero no—sonriendo con nerviosismo

—La ciudad de "Jade "es el lugar perfecto para los juegos de azar, apuestas y negocios clandestinos, no quise ser imprudente preguntando en un principio, pero a juzgar por lo que me has dicho es más que obvio que no sabías nada al respecto.

—No se preocupe, estaremos bien

—Yo que tu cuidaría mucho de mi pareja, el negocio de la prostitución es muy fuerte allí, tengo entendido que secuestran jóvenes hermosas para sus burdeles.

Mientras más escuchaba más terrible sonaba ese lugar, debía ser muy cuidadoso y no perderla de vista ni un segundo, espero encontrar a ese demonio pronto.

—Gracias, tendré cuidado—despidiéndome

Mientras caminaba por aquel sendero recordé lo que el hombre había dicho

"Cuidaría mucho de mi pareja"

Acaso el había visto que...

—Hermano, tu cara esta muy roja

—N-No es nada, démonos prisa

—Esta bien...—colocándose el bambú de nuevo

Al entrar en la ciudad pude ver que varios hombres miraban a mi hermana de una forma desagradable, dejé mi katana a la vista en forma de advertencia. Había demasiada gente, aunque estaba bien iluminada distinguir el camino se me hacía un poco complicado, decidí dejarme llevar por el olor, mientras me concentraba en  encontrar la esencia de aquel demonio un chico de aproximadamente mi edad quiso hacer un trato conmigo.

—¿Cuánto quieres por la chica?

—No está en venta

—¿Estás seguro?—mirándola de pies a cabeza—sería una excelente adquisición

Nezuko se limitó o gruñirle con molestia mientras él seguía mirándola como si fuera carne fresca.

—Vaya, tiene carácter, eso la hará más interesante

—No estoy de humor, vete y déjanos en paz

—Vamos, puedo pagarte el doble

Desenvainé mi katana haciendo que el chico se asustara, no estaba jugando y el pareció entender el mensaje, no tardó mucho en regresar por donde vino, llevé a Nezuko de la mano lo más lejos que pude de allí, después de todo había encontrado aquel olor. Era muy débil pero estaba seguro que hallaría la fuente más adelante, mi nariz me llevó hacia un callejón iluminado con varios letreros de colores, había poca gente y se veía relativamente tranquilo.

—¿Un hotel?—mirando hacia lo que parecía ser "la fuente"

Tenía varios pisos y se veía agradable, supongo, tenía un letrero iluminado en la entrada el cual decía "Luna roja", me quedé observando el lugar por un momento, no parecía tener algo raro además de él olor, al cabo de unos minutos pude ver una pareja muy acaramelada entrar, entendí que no era un hotel normal, esta ciudad de verdad era increíble, creo que no existía algún lugar que no se dedicara a consentir este tipo de cosas, resignado miré hacia mi alrededor en busca de más pistas pero solo vi a un grupo de hombres caminar junto a el chico de antes, se veía muy agitado de seguro les contó sobre mí ya que empezaron a caminar hacia aquí de una manera amenazante al darse cuenta de que encajaba con la descripción que él les había dado.

My little sister's desireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora