Mentiras

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Al día siguiente...

Decidí quedarme la noche anterior en un hotel cercano, era muy cómodo y estaba bastante accesible, al despertar me lavé el rostro y me miré un momento en el espejo tratando de despertarme con agua fría.

—¿pero qué?

Pasé mis dedos sobre la zona

—duele un poco...parece un moretón pero no recuerdo habermelo hecho en la batalla de ayer.

No le dí mucha importancia y me alisté para seguir el camino a mi próxima misión.
Hacia el este! Hacia el este! Dijo el cuervo, en verdad que habían pocos días en los que podía descansar ya que eran misión tras otra.

Mientras caminaba ya bastante lejos del pueblo me encontré a Zenitsu, ambos nos saludamos y seguimos juntos el resto del camino.

Al parecer teníamos la misma misión hacia el este, al llegar rápidamente notamos que algo andaba mal nos informaron que habían sido atacados siete noches seguidas, estas personas realmente necesitaban ayuda.

—Zenitsu...huelo a un demonio

—emmm yo no escucho ni veo nada, ¿no confundiras el olor con el de tu hermana?

—no, ella...huele diferente

—mierd* creo que ya lo puedo oír... a la derecha ¡por ahí!

Efectivamente eran dos demonios, ambos trabajaban en equipo, luchamos contra ellos tan rápido en cuanto nos dimos cuenta de su presencia. Esta noche sería un poco larga.

Momentos después con varias heridas en la espalda y dos demonios decapitados pudimos dar por terminada la misión. Zenitsu y yo hicimos una fogata y nos acercamos a un riachuelo para limpiarnos un poco.

—maldito demonio rasgó mi haori favorito, este me lo dió mi abuelo

—el mío también se rompió un poco pero descuida, mi hermana podrá arreglarlos

—¿de verdad?, hablando de Nezuko-chan, ¿dónde está?

—creo que aún no ha salido

—espero que lo haga pronto, verla me hace sentir mucho mejor

—¿que?

—no mal pienses pero creo que tu hermana es muy hermosa, su presencia irradia luz y esa mirada me transporta a esa estación del año donde caen las flores de cerezo—suspira

El en verdad pensaba eso de Nezuko?, no se por qué pero me molestó un poco escucharlo hablar de esa forma de mi hermana...

Solo estuve en silencio hasta que la susodicha apareció, ella nos saludó y muy contenta aceptó coser nuestros haoris.

—¡Nezuko-chan eres la mejor!

—te lo agradezco hermana

Podría jurar que me hizo una mueca de disgusto cuando la llamé así, ella se dedicó a coser mientras seguí mi charla con Zenitsu a la vez que nos aseábamos.

Me quité la parte superior de mi uniforme y Zenitsu me ayudó a limpiar mis heridas ya que no podía alcanzarlas.

—tienes muchas cicatrices, espero que estas no dejen una marca

—eso espero...

—oye ¿que es esto?

—¿qué es qué?

—en tu cuello, tienes un chupetón...¿ACASO ESTUVISTE CON UNA CHICA?

—¿que? Yo creí que era un moretón cualquiera, esta mañana me dí cuenta de él—nervioso

My little sister's desireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora