Dangerous Promise ◌ ChanBaek ♞

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Capítulo 22: Tregua.
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─Mgh.

Baekhyun se llevó la mano rápidamente hasta su boca para acallar los quejidos que salían cada vez que intentaba sentar su trasero en una silla.

Llevaba toda la mañana queriendo mandar todo al carajo por el dolor que presenciaban sus pobres nalgas. Y aunque quisiese protestar, no tenia derecho. ¿Por qué? Porque él fue el masoquista que había accedido a un mañanero.

El dolor se extendía de su espalda a sus caderas, intensificándose justo en medio de las nalgas. Su vida sexual no había sido tan activa, de hecho con Sehun lo hacían dos veces a la semana porque sino era Baekhyun el que iba a visitar a su madre, era Sehun quien regresaba hasta tarde a casa de trabajar. De su parte no se consideraba una persona que quisiera pasar teniendo sexo seguido, pero Chanyeol. A Chanyeol no lo podía ver a los ojos unos minutos porque ya estaba caliente.

 ─¿Estás bien, Baekkie?─preguntó una voz tras su espalda.

Giró entorno a la voz. encontrándose con el guardaespaldas personal de Chanyeol entrando a la gran cocina en donde Baekhyun trataba de buscar algo con lo cual calmar el dolor y también, algo más de comer. Porque tenía hambre.

─Si, estoy bien. Sólo buscaba algo que comer y.. ¿Sabes si tienen Tylenol o alguna pomada?─ preguntó tratando de entonar con corrección la voz y no acabar delatando el carraspeo de esta; algo en lo que falló por completo y por lo mismo que se sonrojó. Quería que la tierra se lo tragase por esa pésima conversación.

Ni siquiera había gritado tanto..

─¿Seguro? Suenas muy adolorido.

El descarado guardaespaldas se rió de la desgracia de Baekhyun, levantando las cejas con una sugerente molestia. Su rostro demostraba picardía. Sin embargo Baekhyun no dijo nada, solo retomó su camino a buscar algún cereal o fruta para comer. No tenía un apetito en específico, aunque el almacén repleto de productos le daban a volar de hambre. Se preguntaba por qué habían tantas cosas. 

Habían cajas y empaques nuevos de variedad de cosas comestibles. Algunas enlatadas y otras en polvo. Algunas no las conocía, así como esa gran lata de color negro puesta en la estantería de arriba en uno de los muebles. Había un logo de fuego, o al menos eso alcanzaba a ver. En fin dejó de pensar en eso y continuó con su búsqueda. 

─Aquí está el Tylenol.─Baekhyun se dio la vuelta y Luhan le tendió el frasco pequeño de pastillas. Tomó una y con un vaso de agua se la bebió. Al minuto siguiente el guardaespaldas estaba volviendo a hablar. 

─¿Tienes hambre? le llamaré a una sirvienta para que te cocine algo.

─Oh no, tranquilo puedo prepararme algo. ─Se apresuró a decir, observando el tazón repleto de frutas en la esquina del desayunador, agarró una manzana sin pensarlo y la levantó en el aire.─ Aunque no tengo mucho apetito, me conformo con esto.

─¿Estás seguro?

Baekhyun asintió. Y de allí el silencio reinó, ninguno de los dos dijo nada más, Baekhyun porque no lo encontró necesario y Luhan, Luhan no sabía que hacía todavía ahí. A Baekhyun le estaba incomodando así que soltó algo que lo había estado teniendo con dudas desde que había llegado a la mansión.

─ Luhan ¿Puedo hacerte una pregunta?─la manzana a medio comer quedó de lado y Baekhyun se apoyó en el otro lado del desayunador.

Al inicio el guardaespaldas se mostró confundido pero al final cedió y con un asentimiento le indicó que siguiera.